Esta receta incluye salsa blanca casera en lugar de sopa cremosa de champiñones enlatada, lo cual reduce considerablemente la cantidad de sodio sin sacrificar el sabor.
Para hacer una versión vegana de este plato, usa un sustituto de la leche.
Calienta el horno a 350 °F (175 °C).
Calienta una sartén grande a fuego bajo y agrega 2 cucharaditas de aceite de oliva. Agrega cebolla cortada en rodajas y sofríe durante 15 a 20 minutos; revuelve con frecuencia hasta que se dore la cebolla. Retira la cebolla de la sartén y reserva.
Agrega la cucharadita de aceite de oliva restante, la cebolla picada y el ajo a la sartén y cocina durante 2 a 3 minutos. Agrega el agua y los champiñones y cocina durante 5 minutos más. Espolvorea la mezcla con harina y tomillo y revuelve. Incorpora la leche revolviendo gradualmente. Aumenta a fuego medio y revuelve constantemente hasta que la salsa se espese.
Para cocinar los ejotes, hierve durante 8 a 10 minutos en agua. (O, para ahorrar tiempo, cocina los ejotes con 2 cucharadas de agua, tápalos y colócalos dentro del microondas a máxima potencia durante 5 minutos).
Escurre los ejotes y reserva. Rocía la cazuela de 2 cuartos (casi 2 litros) con aceite en aerosol y coloca los ejotes dentro. Vierte la salsa de champiñones sobre los ejotes. Cubre con las rodajas de cebolla sofritas y el pan fresco rallado. Hornea durante 15 minutos o hasta que se dore la parte superior.
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