Diagnóstico
El profesional de atención médica te hará una serie de preguntas sobre los síntomas, el historial médico y los medicamentos. Para determinar si tienes trombocitopenia, es probable que se realice lo siguiente:
- Análisis de sangre. Un hemograma completo determina el número de células sanguíneas, incluidas las plaquetas, en una muestra de sangre. El profesional de atención médica puede comparar los resultados de un examen reciente con los de exámenes anteriores.
- Frotis de sangre. Es un análisis de laboratorio que consiste en observar una muestra de sangre bajo un microscopio para contar las plaquetas. Un especialista busca plaquetas agrupadas o irregulares, y también examina otras células sanguíneas.
- Examen físico. El profesional de atención médica buscará señales de sangrado debajo de la piel, en las encías o en el revestimiento de la boca. También examinará el tamaño o la sensibilidad del bazo, el hígado y los ganglios linfáticos.
El profesional de atención médica podría recomendar otras pruebas y procedimientos para determinar la causa de la afección, según tus signos y síntomas.
Tratamiento
Las personas con trombocitopenia leve podrían no necesitar tratamiento. Los tratamientos para casos más graves dependen de la causa y del riesgo de complicaciones.
El tratamiento de la causa puede incluir lo siguiente:
- Suspender un medicamento que probablemente causó la trombocitopenia.
- Tratar una enfermedad subyacente, como una infección o cáncer.
Otros tratamientos pueden ser los siguientes:
- Medicamentos. Si la trombocitopenia está relacionada con un trastorno del sistema inmunitario, se pueden usar medicamentos para controlar la actividad del sistema inmunitario. El medicamento más común es un corticoide.
- Transfusiones de plaquetas. En las transfusiones de plaquetas se usan plaquetas de donantes para aumentar la cantidad en el torrente sanguíneo. Se administran a través de una aguja en una vena. Las transfusiones de plaquetas pueden usarse cuando el recuento de plaquetas es demasiado bajo.
- Recambio plasmático. En algunos casos, el riesgo grave de formación de coágulos sanguíneos puede requerir un recambio plasmático. Con este procedimiento, la sangre circula de la persona a una máquina que elimina el plasma y lo reemplaza con plasma de un donante o un sustituto del plasma. Luego, la sangre vuelve a circular hacia la persona.
- Cirugía. La cirugía para extirpar el bazo se llama esplenectomía. Se puede realizar si el bazo está agrandado o afectado por la enfermedad. También puede ser necesaria si otros tratamientos no logran mejorar el recuento bajo de plaquetas.
Estilo de vida y remedios caseros
Si tienes trombocitopenia, intenta lo siguiente:
- Evita las actividades que puedan causar lesiones. Si un trabajo implica riesgo de lesión, usa equipo de protección y sigue las pautas de seguridad. Pregunta al profesional de atención médica si deberías evitar los deportes de contacto que aumentan el riesgo de lesiones. Usa casco cuando andes en bicicleta o patineta, o hagas actividades similares.
- Evita el alcohol. El alcohol hace más lenta la producción de plaquetas en el cuerpo. Pregúntale al profesional de atención médica si está bien que bebas alcohol.
- Toma con cautela los medicamentos sin receta. Los analgésicos, como la aspirina y el ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros), pueden impedir que las plaquetas funcionen correctamente. El acetaminofén (Tylenol, otros) es una mejor alternativa.
Preparación para la consulta
Si tienes síntomas de trombocitopenia, comienza por ver a un profesional de atención primaria. Además, un recuento bajo de plaquetas puede detectarse en un hemograma completo durante un chequeo anual o en pruebas para otra afección.
Es posible que te remitan a un especialista en enfermedades de la sangre (es decir, un hematólogo) u otro especialista según la posible causa del recuento bajo de plaquetas.
A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte para la cita médica.
Qué puedes hacer
Cuando programes la cita médica, pregunta si hay algo que debas hacer por adelantado, como restringir tu alimentación.
Prepara una lista de lo siguiente:
- Los signos de advertencia que notaste, como hematomas o sangrados inusuales, o erupciones cutáneas. Registra cuándo comenzaron. Anota otros síntomas, aunque no parezcan estar relacionados con tu preocupación principal.
- Información personal crucial, por ejemplo, enfermedades recientes o procedimientos médicos como transfusiones de sangre, situaciones de estrés importantes o cambios recientes en la vida.
- Todos los medicamentos, las vitaminas u otros suplementos que tomas, incluidas sus dosis y los motivos por los que los tomas.
- Preguntas para hacerle al profesional de atención médica.
Si es posible, pídele a un familiar o a un amigo que te acompañe para que te ayude a recordar la información que recibas.
Algunas de las preguntas que puedes hacerle al profesional de atención médica son las siguientes:
- ¿Cuántas plaquetas tengo en la sangre?
- ¿El recuento de plaquetas es peligrosamente bajo?
- ¿Qué es lo que causa la trombocitopenia que presento?
- ¿Tienen que hacerme más pruebas?
- ¿Es probable que la afección sea temporal o crónica?
- ¿Cuáles son las opciones de tratamiento?
- ¿Qué sucederá si no hago nada?
- ¿Debo respetar alguna restricción?
- ¿Hay material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
Qué esperar del médico
Preguntas que podría hacer el profesional de atención médica:
- ¿Te salen moretones con facilidad?
- ¿Sangras mucho con heridas pequeñas?
- ¿Has tenido sangrado en las encías?
- ¿Hay antecedentes médicos de trastornos de sangrado o trombocitopenia en tu familia?
- ¿Empezaste recientemente a tomar un medicamento nuevo?
- ¿Hay medicamentos que tomas de vez en cuando?
- ¿A dónde has viajado últimamente?
- ¿Has tenido alguna enfermedad bacteriana o viral o has estado expuesto a una recientemente?
- ¿Cuánto alcohol bebes?
- ¿Tienes restricciones en tu dieta?
- ¿Has experimentado pérdida peso o cambios en el apetito sin razón?
- ¿Has tenido dolor en los huesos?