Descripción general
Arteria carótida
Arteria carótida
Las arterias carótidas son un par de vasos sanguíneos. Hay una a cada lado del cuello. Estas arterias llevan la sangre al cerebro y a la cabeza.
La ecografía carotídea es un procedimiento que utiliza ondas sonoras para observar el flujo sanguíneo a través de las arterias carótidas. Las arterias carótidas son un par de vasos sanguíneos situados a cada lado del cuello. Estas llevan la sangre del corazón al cerebro.
La ecografía carotídea también permite revisar el grosor de la pared de la arteria carótida y la presencia de coágulos sanguíneos.
La prueba puede ayudar a los profesionales de atención médica a ver si las arterias carótidas están obstruidas o estrechadas. El estrechamiento de las arterias aumenta el riesgo para accidente cerebrovascular. Los resultados de la prueba también ayudan a su profesional de atención médica a elegir un tratamiento para reducir el riesgo para accidente cerebrovascular.
Productos y servicios
Por qué se realiza
Accidente cerebrovascular isquémico
Accidente cerebrovascular isquémico
Un accidente cerebrovascular isquémico se produce cuando un coágulo de sangre, conocido como trombo, bloquea o tapa una arteria que se comunica con el cerebro. Por lo general, un coágulo sanguíneo se forma en las arterias dañadas por la acumulación de placas, denominada ateroesclerosis. Puede ocurrir en la arteria carótida del cuello, así como en otras arterias.
Una ecografía carotídea permite detectar estrechamientos u obstrucciones de las arterias carótidas, que pueden aumentar el riesgo para accidente cerebrovascular. Estas arterias se encuentran a cada lado del cuello.
Los vasos sanguíneos se estrechan cuando se acumula placa en su interior. Esto lleva a una reducción del flujo sanguíneo. Las placas están formadas por grasa, colesterol, calcio y otras sustancias que circulan por la sangre. El diagnóstico y tratamiento tempranos de un estrechamiento de la arteria carótida pueden reducir el riesgo para accidente cerebrovascular.
El profesional de atención médica pedirá una ecografía carotídea si tienes un accidente isquémico transitorio, también llamado miniaccidente cerebrovascular. También es posible que necesites esta prueba si tienes otros tipos de accidente cerebrovascular o una afección que aumente el riesgo para este.
Es posible que necesites una ecografía carotídea si tienes:
- Presión arterial alta.
- Diabetes.
- Colesterol alto.
- Antecedentes familiares de accidente cerebrovascular o enfermedad cardíaca.
- Un accidente isquémico transitorio o accidente cerebrovascular reciente.
- Un sonido en las arterias carótidas conocido como soplo. Este puede oírse con un estetoscopio.
- Enfermedad de las arterias coronarias.
- Endurecimiento de las arterias, conocido como arteriosclerosis.
Otros usos de la ecografía carotidea
El profesional de atención médica también puede solicitar una ecografía carotídea para lo siguiente:
- Evaluar el flujo sanguíneo a través de la arteria carótida después de la cirugía para extraer placas. El procedimiento para extraer las placas se llama endarterectomía carotídea.
- Revisar la colocación de un catéter de malla llamado estent que se introduce en una arteria durante la cirugía para mejorar el flujo sanguíneo. La prueba también permite comprobar el funcionamiento del estent.
- Buscar una acumulación de sangre coagulada, conocida como hematoma, que pueda impedir el flujo sanguíneo.
- Buscar otros cambios en la arteria carótida que puedan afectar al flujo sanguíneo.
- Predecir la enfermedad de las arterias coronarias al medir el grosor de la arteria carótida. La ecografía carotídea también permite observar las características de una placa.
- Controlar el flujo sanguíneo de la arteria carótida durante la cirugía de la válvula cardíaca aórtica. Esto ayuda al profesional de atención médica a comprender tu riesgo para accidente cerebrovascular.
- Construir un modelo tridimensional de la arteria carótida para mejorar la precisión de los diagnósticos.
Más información
Riesgos
La ecografía carotídea no está relacionada con ningún riesgo. Es posible que sientas una presión durante la prueba, pero la prueba no causa dolor. La ecografía carotídea no tiene efectos nocivos.
Cómo prepararse
Para prepararte para una ecografía carotídea:
- Procura llevar una camisa cómoda con el cuello abierto.
- No uses collares ni aros colgantes.
Sigue todas las instrucciones que recibas del profesional de atención médica o del laboratorio radiológico.
Lo que puedes esperar
Cómo funciona
La persona que hace el examen, llamada ecografista, realiza una ecografía carotídea con un pequeño dispositivo portátil denominado transductor. El transductor emite ondas de sonido y registra el eco que producen las ondas cuando rebotan contra los tejidos, los órganos y las células sanguíneas.
Una computadora convierte el eco de las ondas de sonido en una imágenes que se reproducen en un monitor. La persona que hace la prueba puede hacer una ecografía Doppler, que muestra la circulación de la sangre en las arterias. En la ecografía Doppler, el ritmo del flujo sanguíneo se representa en un gráfico.
Se han producido muchos avances en las ecografías carotídeas para mejorar la calidad y la resolución de las imágenes.
Una ecografía carotídea suele llevar unos 30 minutos.
Durante el procedimiento
Lo más probable es que estés recostado boca arriba durante la ecografía. La persona que hace la ecografía puede acomodarte la cabeza para acceder mejor al costado del cuello.
Luego te aplicará un gel tibio en la piel sobre la zona de cada arteria carótida. Este gel ayuda a trasmitir las ondas de la ecografía de un lado a otro. La persona que hace la ecografía presionará el transductor suavemente contra el costado del cuello.
El procedimiento no genera molestias. Si sientes molestias, informa a la persona que hace la ecografía.
Resultados
Un médico especializado en estudios por imágenes, llamado radiólogo, revisa los resultados de la ecografía carotídea. El radiólogo puede revisar los resultados contigo justo después del procedimiento.
El radiólogo envía un informe al profesional de atención médica que solicitó la ecografía carotídea. Puede tratarse de un médico especializado en afecciones del corazón y los vasos sanguíneos, llamado cardiólogo. También puede ser un médico especializado en afecciones cerebrales y del sistema nervioso, llamado neurólogo.
El profesional de atención médica que pidió la prueba te explicará lo que reveló la ecografía carotídea y lo que eso significa para ti.
Si la prueba muestra que tienes riesgo de accidente cerebrovascular, el profesional de atención médica puede recomendarte lo siguiente, según la gravedad de la obstrucción:
- Llevar una dieta saludable, que incluya frutas, verduras, panes integrales y granos o cereales integrales. Limitar las grasas saturadas en tu alimentación.
- Haz ejercicio con regularidad.
- Mantener un peso saludable.
- Adoptar una alimentación saludable para el corazón, como la dieta mediterránea.
- No fumes. Evitar el humo de segunda mano.
- Tomar medicamentos para disminuir el colesterol en sangre y la presión arterial.
- Tomar medicamentos para prevenir los coágulos sanguíneos.
- Someterte a un procedimiento quirúrgico para extraer las placas de la arteria carótida. Este procedimiento se denomina endarterectomía carotídea.
- Someterte a un procedimiento quirúrgico para abrir y sujetar las arterias carótidas. Este procedimiento se denomina angioplastia de la carótida y colocación de estent.
Si el profesional de atención médica pidió una ecografía carotídea como seguimiento de la cirugía, la prueba puede mostrar si el tratamiento está funcionando. También puede indicar al profesional de atención médica si necesitas otro tratamiento o exámenes de seguimiento.
Otras pruebas
Si los resultados no son concluyentes, es posible que te hagan otros estudios por imágenes, por ejemplo:
- Angiografía por tomografía computarizada. En una angiografía por tomografía computarizada se usan una serie de rayos X para producir imágenes detalladas de los vasos sanguíneos en el cuerpo. Se puede inyectar un sustancia de contraste en una vena para ver mejor las arterias carótidas.
- Imágenes por resonancia magnética. Una resonancia magnética usa un campo magnético y ondas radioeléctricas para producir imágenes detalladas de los tejidos blandos en el cuerpo. Una resonancia magnética puede detectar placas y sangrado. También se puede realizar una angiografía por resonancia magnética para ver mejor los vasos sanguíneos.
- Ecografía mejorada con contraste. La introducción de un medio de contraste en la vena ayuda a detectar el endurecimiento prematuro de las arterias. También permite saber si hay futuras enfermedades vasculares.
- Ecografía tridimensional. Esta prueba mejora la visualización de los vasos sanguíneos durante la exploración. También ayuda a evaluar la placa. Pero la ecografía tridimensional puede infravalorar el estrechamiento de la arteria carótida.