Vagina: lo que es típico y lo que no lo es

La salud vaginal no solo afecta a la vida sexual. Infórmate sobre los problemas vaginales más comunes y cómo tener una vagina saludable.

Escrito por el personal de Mayo Clinic

La salud vaginal es vital para el estado de salud general. Cuando la vagina no está en buen estado de salud, puede afectar a la calidad de las relaciones sexuales y a los orgasmos. También puede afectar al embarazo. Los problemas de salud vaginal que se prolongan durante mucho tiempo pueden causar estrés o problemas de pareja. Los problemas de salud vaginal también pueden afectar a cómo te sientes contigo misma. Infórmate sobre los síntomas de los problemas de salud vaginal y sobre lo que puedes hacer para mantener la vagina saludable.

¿Qué afecta la salud de la vagina?

La vagina es un canal muscular cerrado. Va desde el exterior de los genitales, llamado vulva, hasta el cuello del útero, llamado cérvix.

Entre los factores que pueden afectar a la salud de la vagina se incluyen:

  • Actividad sexual. Tener relaciones sexuales sin protección puede derivar en infecciones de trasmisión sexual. Las relaciones sexuales forzadas o una lesión en la zona pélvica pueden dañar la vagina.
  • Determinadas enfermedades y tratamientos. Algunas afecciones que afectan a la vagina pueden causar dolor durante las relaciones sexuales. Entre ellas se encuentra la endometriosis, una enfermedad en la que un tejido similar al revestimiento interno del útero crece fuera de él. Otra afección que puede afectar a la vagina y causar dolor en las relaciones sexuales es una infección de los órganos reproductores, denominada enfermedad inflamatoria pélvica. Las cicatrices de una cirugía pélvica y algunos tratamientos contra el cáncer también pueden causar dolor en las relaciones sexuales. El uso de algunos antibióticos aumenta el riesgo para candidiasis vaginal.
  • Anticonceptivos y productos de higiene. Los anticonceptivos que bloquean el esperma, llamados anticonceptivos de barrera, pueden irritar la vagina. Entre ellos se incluyen los preservativos, los diafragmas y el espermicida que va con ellos. El uso de esprays, desodorantes o duchas vaginales también puede irritar la vagina.
  • Embarazo y parto. El embarazo suele causar más flujo vaginal. Durante el parto pueden producirse desgarros vaginales. A veces es necesario hacer una episiotomía, es decir, un corte en el tejido de la abertura vaginal, durante el parto. Un parto vaginal puede afectar al tono muscular de la vagina.
  • Problemas psicológicos. Las preocupaciones y la depresión pueden disminuir la excitación sexual. Eso puede causar molestias o dolor durante las relaciones sexuales. Los abusos sexuales o una experiencia sexual dolorosa también pueden llevar al dolor en las relaciones sexuales.
  • Niveles hormonales. Los cambios en los niveles hormonales también pueden afectar la vagina. Por ejemplo, hay menos estrógenos en el cuerpo después de la menopausia y durante la lactancia. La pérdida de estrógenos puede hacer que el revestimiento vaginal se vuelva más fino, lo que se denomina atrofia vaginal. Esto puede llevar a tener dolor durante las relaciones sexuales.

¿Cuáles son los problemas vaginales más frecuentes?

Entre las afecciones que pueden afectar la vagina se incluyen:
  • Cuestiones sexuales. Por ejemplo, dolor constante o dolor que aparece justo antes, durante o después de tener relaciones sexuales. Las relaciones sexuales dolorosas se denominan dispareunia. Por dolor con la penetración se entiende que el dolor se produce cuando algo entra en la vagina. Este tipo de dolor puede estar causado por espasmos musculares de la pared vaginal, denominados vaginismo.

    Los músculos del suelo pélvico pueden tensarse, lo que causa dolor continuo y dolor durante las relaciones sexuales. La sequedad vaginal también puede causar dolor durante las relaciones sexuales. La sequedad vaginal suele aparecer cuando se acerca la menopausia, lo que se denomina perimenopausia, o después de la menopausia.

  • Infecciones de trasmisión sexual. Las infecciones de trasmisión sexual como la clamidia, la gonorrea, las verrugas genitales, la sífilis y el herpes genital pueden afectar a la vagina. Los síntomas pueden incluir flujo vaginal o llagas genitales.
  • Vaginitis. Una infección o un cambio en el equilibrio de levaduras y bacterias vaginales puede causar hinchazón e irritación de la vagina. Los síntomas incluyen secreción vaginal, olor, picazón y dolor. Entre los tipos más comunes de vaginitis se encuentran la candidiasis y la tricomoniasis.
  • Vaginosis bacteriana. Esta puede ocurrir cuando los niveles de bacterias naturales de la vagina están desequilibrados. La menstruación, las duchas vaginales o las relaciones sexuales pueden derivar en una vaginosis bacteriana. Los síntomas pueden incluir flujo vaginal y olor.
  • Relajación del suelo pélvico. Los ligamentos y tejidos conectivos mantienen el útero y las paredes vaginales en su sitio. Si estos ligamentos y tejidos se debilitan, el útero, la vejiga, el recto o las paredes vaginales pueden deslizarse hacia abajo. Esto se denomina prolapso. El prolapso puede causar un bulto en la vagina o pérdidas de orina al toser y estornudar.
  • Otras afecciones. Los quistes vaginales pueden causar dolor durante las relaciones sexuales o dificultar la colocación de un tampón. El cáncer vaginal, que puede manifestarse por primera vez en forma de sangrado vaginal después de la menopausia o de tener relaciones sexuales, también es posible, pero es poco frecuente.

¿Cuáles son los síntomas de los problemas vaginales?

Habla con un miembro del equipo de atención médica si tienes:
  • Un cambio en el color, el olor o la cantidad de secreción vaginal.
  • Cambios en el color de la piel de la vagina o picazón.
  • Sangrado vaginal entre los períodos menstruales, después de las relaciones sexuales o después de la menopausia.
  • Una protuberancia o un bulto en la vagina.
  • Dolor durante las relaciones sexuales o problemas para tenerlas.
  • Problemas para ponerse un tampón.
Quizás no necesites acudir al profesional de atención médica cada vez que tengas irritación y secreción vaginal. Si te han diagnosticado una infección vaginal por levaduras en el pasado y tienes los mismos síntomas, puedes probar con el medicamento que utilizabas antes. Si los síntomas no desaparecen después de tomar el medicamento, consulta al profesional de atención médica.

¿Qué puedo hacer para mantener la vagina en buen estado de salud?

Puedes tomar medidas para proteger la salud vaginal y tu salud general. Prueba lo siguiente:

  • Ten relaciones sexuales de manera más segura. Usa preservativos. O ten relaciones sexuales con una sola pareja que solo tenga relaciones sexuales contigo y que no tenga infecciones de trasmisión sexual. Si usas juguetes sexuales, límpialos después de cada uso.
  • Recibe vacunas. Las vacunas pueden protegerte del virus del papiloma humano (VPH), que es el virus asociado al cáncer del cuello del útero. Y puedes recibir una vacuna para protegerte contra la hepatitis B. Se trata de una infección grave del hígado que puede contagiarse a través de las relaciones sexuales.
  • Haz los ejercicios de Kegel. Los ejercicios de Kegel pueden ayudar a tonificar los músculos del suelo pélvico si el útero y las paredes vaginales se han deslizado, lo que se denomina prolapso. Los ejercicios de Kegel también pueden ayudar en caso de pérdidas de orina o debilidad del suelo pélvico.
  • Infórmate sobre tus medicamentos. Consulta al profesional de atención médica sobre los medicamentos que tomas. Debes saber qué efectos secundarios pueden causar.
  • Limita la cantidad de alcohol que bebes y no fumes. El abuso del alcohol puede perjudicar la vida sexual. La nicotina puede influir en la excitación. El abuso de sustancias adictivas también puede ser causa de problemas de salud física y mental. Ambos pueden afectar a tu vida sexual.
  • Hazlo con delicadeza. No te laves el interior de la vagina. Y no uses productos que puedan irritarla. Por ejemplo, toallitas, duchas vaginales o jabones fuertes. No utilices productos perfumados.

No se pueden prevenir todos los problemas vaginales. Pero someterse a revisiones periódicas puede ayudar a que los problemas vaginales se diagnostiquen lo antes posible. Es importante que hables abiertamente con el profesional de atención médica sobre la salud vaginal.

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July 02, 2025 See more In-depth