Narrador: Si tu médico sospecha que eres alérgico, puede recomendarte una prueba de alergia. La prueba es la misma para niños y adultos y generalmente se realiza en el consultorio del alergólogo. La mayoría de las personas afirma que la prueba se siente como un pequeño pinchazo o picadura, pero es indolora.
Enfermera: Buenos días. ¿Estás listo para la prueba cutánea?
Paciente: Sí, estoy listo.
Enfermera: Bien, ven conmigo.
Narrador: La prueba de alergia se puede realizar en la espalda o en el antebrazo. Este video muestra esta última.
La enfermera preparará la zona donde se realizará la prueba limpiándola con alcohol. Luego, hará una serie de marcas pequeñas en el brazo con un bolígrafo para indicar dónde se aplicará la prueba.
Colocará una pequeña gota del alérgeno en cada marca. En este ejemplo, la prueba incluye hierbas, moho y hongos que se encuentran en el ambiente. También se incluyen árboles comunes como olmo, arce, nogal y roble, además de gatos, polvo y otras cosas comunes con las que se encuentran las personas.
Una vez colocadas todas las gotas, la enfermera toma un pequeño instrumento de plástico puntiagudo llamado lanceta y rasca la piel a través de cada gota de extracto. Se usa una lanceta nueva para cada raspaje.
Las reacciones tardan unos 15 minutos en desarrollarse por completo. En ese momento, la enfermera volverá para medir la reacción, que aparece como pequeños círculos de inflamación llamados habones. Los habones pueden picar y se parecen a las picaduras de mosquitos. La gravedad de la alergia se mide por el tamaño del habón con una regla milimétrica.
Después de la prueba, la enfermera puede darle un poco de crema para frotar en la zona de la prueba para aliviar la picazón y el malestar de la prueba de piel. El enrojecimiento, las protuberancias y los síntomas generalmente desaparecen en un día. Es poco probable que necesites otra prueba de alergia si con el programa de tratamiento logras controlar las alergias.
Una vez que se calculen los resultados de la prueba, el médico hablará contigo sobre los resultados y los posibles tratamientos. Según la gravedad de la reacción, es posible que el médico te recomiende una terapia o una combinación de terapias, que pueden incluir inmunoterapia o medicación diaria, y cómo evitar el alérgeno.