Diagnóstico

El sarcoma epitelioide puede ser difícil de diagnosticar, ya que puede parecerse a problemas que son mucho más comunes. A menudo, los profesionales de atención médica primero consideran estos problemas más comunes. Por ejemplo, una llaga en la piel que no cicatriza puede confundirse con una infección en la piel.

Las pruebas y los procedimientos utilizados en el diagnóstico del sarcoma epitelioide incluyen los siguientes:

  • Estudios por imágenes. Los estudios por imágenes permiten obtener imágenes del cuerpo. Pueden mostrar la ubicación y el tamaño de un sarcoma epitelioide. Las pruebas pueden incluir radiografías, resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y tomografías por emisión de positrones, o PET, por sus siglas en inglés.
  • Extirpación de tejido para análisis. Una biopsia es un procedimiento que consiste en extraer una muestra de tejido para analizarla en un laboratorio. El tejido puede obtenerse con una aguja que se introduce a través de la piel hasta llegar al tumor. En ocasiones, se requiere una cirugía para tomar la muestra de tejido. La muestra se analiza en un laboratorio para determinar si es cáncer. Hay otras pruebas especiales que proporcionan más detalles sobre las células cancerosas. El equipo de atención médica tiene en cuenta esta información para crear un plan de tratamiento.