La COVID-19, el resfriado, las alergias estacionales y la gripe tienen varios síntomas similares. Obtén más información sobre algunas de las diferencias importantes de estas enfermedades.

Escrito por el personal de Mayo Clinic

La enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) puede causar muchos de los mismos síntomas que el resfriado, las alergias estacionales y la gripe. Entonces, ¿cómo puedes saber si tienes la COVID-19?

Puede ser útil comprender las diferencias entre los síntomas que estas enfermedades causan. Además, averigua cómo se contagian, se tratan y se pueden prevenir.

La única manera de estar seguros de que tienes la COVID-19 es someterse a una prueba de inmediato. Si tienes síntomas de la enfermedad, puedes usar un kit para hacer la prueba de la COVID-19 en casa. O comunícate con un profesional de atención médica. Describe cómo te sientes y pregunta cómo puedes someterte a una prueba.

La COVID-19 es una enfermedad respiratoria que se contagia de una persona a otra. Ocurre a causa de una infección por el virus SARS-CoV-2. El virus generalmente se contagia entre personas que están en contacto cercano. Se propaga a través de gotitas que se liberan cuando una persona infectada respira, tose, estornuda, habla o canta. Estas gotitas pueden inhalarse o caer en la boca o en la nariz de una persona que está cerca. El virus también se contagia si tocas una superficie o un objeto donde se encuentra el virus y, luego, te llevas la mano a la boca, la nariz o los ojos. Sin embargo, este riesgo es bajo.

Los síntomas más comunes de la COVID-19 han cambiado con el tiempo. Actualmente, son congestión o goteo nasal, dolor de cabeza e irritación de la garganta. Pero hay muchos otros síntomas posibles, como fiebre, tos y cansancio. Muchas personas con la COVID-19 presentan una enfermedad leve. Sin embargo, la enfermedad puede ser grave y causar complicaciones. Para algunas personas, puede poner en riesgo la vida.

El tratamiento para una enfermedad leve incluye descanso en casa. Tomar medicamentos como acetaminofén (Tylenol, otros) o ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) puede mejorar la fiebre y el malestar. En los Estados Unidos, la Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó algunos medicamentos para tratar la COVID-19. Actualmente, los investigadores están probando una variedad de posibles tratamientos. No hay ninguna cura disponible para la COVID-19. Los medicamentos antibióticos que actúan contra las infecciones bacterianas no funcionan contra infecciones virales como la COVID-19.

Tanto la COVID-19 como el resfriado son causados por virus. La causa de la COVID-19 es el virus SARS-CoV-2. El resfriado, por lo general, es causado por un rinovirus. Todos estos virus se diseminan de manera similar y ocasionan muchos síntomas iguales. Sin embargo, existen algunas diferencias.

Comprobación de síntomas: ¿Es COVID-19 o un resfriado?

Síntoma COVID-19 Resfriado
Dolor de cabeza Normalmente Raramente
Tos Algunas veces (seca) A veces
Dolores musculares A veces Nunca
Cansancio
Normalmente Nunca
Estornudos
A veces A veces
Irritación de garganta Normalmente Normalmente
Goteo o congestión nasal
Normalmente Normalmente
Fiebre A veces Raramente
Diarrea A veces Normalmente
Náuseas o vómitos A veces A veces
Dificultad para respirar o falta de aire
A veces Nunca
Pérdida reciente del sentido del gusto o del olfato
Algunas veces (al inicio, a menudo, sin goteo de la nariz ni congestión nasal) Nunca

Los síntomas de la COVID-19 generalmente comienzan de 2 a 14 días después de la exposición al SARS-CoV-2. Sin embargo, los síntomas de un resfriado suelen aparecer de 1 a 3 días después de la exposición a un virus que causa resfriado.

No hay cura para el resfriado. Es posible que el tratamiento incluya analgésicos y remedios para tratar el resfriado que están disponibles sin receta médica, como los descongestionantes. A diferencia de la COVID-19, un resfriado suele ser inofensivo. La mayoría de las personas se recupera de un resfriado en un plazo de 3 a 10 días. Sin embargo, algunos resfriados pueden durar hasta dos semanas.

A diferencia de la COVID-19, la causa de las alergias estacionales no es un virus. Las alergias estacionales son respuestas del sistema inmunitario desencadenadas por la exposición a alérgenos, como el polen estacional de los árboles o la hierba.

La COVID-19 y las alergias estacionales pueden causar muchos síntomas similares. Sin embargo, hay algunas diferencias.

Comprobación de síntomas: ¿Es COVID-19 o una alergia estacional?

Síntoma COVID-19 Alergia
Dolor de cabeza Normalmente Raramente
Tos Algunas veces (seca) A veces
Fiebre A veces Nunca
Dolores musculares A veces Nunca
Cansancio Normalmente A veces
Picazón en la nariz, en los ojos, en la boca o en el oído interno A veces Normalmente
Estornudos A veces Normalmente
Irritación de garganta Normalmente A veces
Goteo o congestión nasal Normalmente Normalmente
Conjuntivitis A veces A veces
Náuseas o vómitos A veces Nunca
Diarrea A veces Nunca
Dificultad para respirar o falta de aire A veces A veces
Pérdida reciente del sentido del gusto o del olfato Algunas veces (al inicio, a menudo, sin goteo de la nariz ni congestión nasal) A veces

La COVID-19 puede causar falta de aire o dificultad para respirar. Sin embargo, las alergias estacionales no suelen causar estos síntomas. Esto es así, a menos que tengas una afección respiratoria, como el asma, que puede desencadenarse por la exposición al polen.

El tratamiento de las alergias estacionales puede incluir lo siguiente:

  • Antihistamínicos, que son los medicamentos que bloquean una sustancia química que produce el sistema inmunitario durante una reacción alérgica.
  • Descongestionantes, que son los medicamentos que pueden aliviar por un período corto la congestión nasal y de los senos paranasales.
  • Atomizadores nasales con esteroides que previenen y alivian la congestión.
  • En lo posible, mantenerte alejado de los alérgenos que desencadenan tus síntomas.

Las alergias estacionales pueden durar varias semanas.

La COVID-19 y la gripe son enfermedades respiratorias que se contagian de una persona a otra. Las dos son causadas por virus. La COVID-19 la causa el virus SARS-CoV-2. La gripe la causan los virus de la influenza A, B y C. Todos estos virus se diseminan de manera similar.

La COVID-19 y la gripe causan muchos síntomas similares, aunque hay algunas diferencias. Las enfermedades también pueden ser asintomáticas, causar síntomas leves o causar síntomas graves. Debido a que los síntomas se pueden superponer, es posible que te hagan pruebas para determinar si tienes la COVID-19 o gripe. También puedes tener las dos enfermedades al mismo tiempo.

Comprobación de síntomas: ¿Es la COVID-19 o gripe?

Síntoma COVID-19 Gripe
Dolor de cabeza Normalmente Normalmente
Tos Algunas veces (seca) Normalmente
Dolores musculares A veces Normalmente
Cansancio
Normalmente Normalmente
Estornudos
A veces A veces
Irritación de garganta Normalmente Normalmente
Goteo o congestión nasal
Normalmente Normalmente
Fiebre A veces Normalmente
Náuseas o vómitos
A veces A veces (más común en los niños)
Diarrea A veces A veces (más común en los niños)
Dificultad para respirar o falta de aire
A veces A veces
Pérdida reciente del sentido del gusto o del olfato
Algunas veces (al inicio, a menudo, sin goteo de la nariz ni congestión nasal)  Raramente

Los síntomas de la COVID-19 generalmente comienzan de 2 a 14 días después de la exposición al SARS-CoV-2. Los síntomas de la gripe suelen aparecer entre 1 y 4 días después de la exposición al virus que causa esta enfermedad.

En comparación con la gripe, la COVID-19 puede causar cuadros más graves de la enfermedad en algunas personas. Además, la COVID-19 pueden causar complicaciones diferentes a las de la gripe.

Los medicamentos antivirales pueden ayudar al cuerpo a combatir los virus. Algunos están aprobados para tratar la COVID-19 y otros están aprobados para la gripe.

Si tienes más riesgo de enfermar gravemente por la COVID-19 o la gripe, habla con un profesional de atención médica sobre la mejor manera de protegerte. Aprende qué debes hacer si te enfermas para que puedas iniciar el tratamiento rápidamente.

Puedes reducir el riesgo de infectarte con uno de los virus que causa la COVID-19, la gripe o el resfriado si tomas algunas medidas estándar de seguridad.

Recibe las vacunas

Cada año, recibe la vacuna contra la gripe y mantente al día con las vacunas contra la COVID-19. La vacuna contra la COVID-19 puede reducir el riesgo de morir o enfermar gravemente por la COVID-19.

Recibir cada año la vacuna contra la gripe puede reducir el riesgo de contraerla. Se puede administrar con una inyección o con un atomizador nasal. La vacuna antigripal también reduce la probabilidad de tener un caso grave de gripe y reduce el riesgo de complicaciones.

Lávate las manos con frecuencia y mantén una buena higiene

Lávate con agua y jabón, y frótate durante, al menos, 20 segundos. O bien, usa un desinfectante de manos a base de alcohol que tenga, por lo menos, un 60 % de alcohol.

Lávate las manos muy bien y frecuentemente con agua y jabón durante, al menos, 20 segundos. Si no dispones de agua ni jabón, utiliza un desinfectante de manos a base de alcohol que tenga por lo menos un 60 % de alcohol. Asegúrate de que los amigos y los familiares a quienes ves con frecuencia, en especial, los niños, sepan sobre la importancia de lavarse las manos.

Cúbrete la boca y la nariz con la parte interna del brazo o un pañuelo desechable cuando tosas o estornudes. Desecha en la basura el pañuelo que usaste. Lávate las manos de inmediato.

Intenta no tocarte los ojos, la nariz ni la boca.

Limpia y desinfecta regularmente las superficies que se tocan con frecuencia

Limpia regularmente las superficies que se tocan con frecuencia para prevenir la diseminación de la infección por tocar una superficie con el virus y, luego, tu cara. Algunos ejemplos de superficies que se tocan con frecuencia son las manijas de las puertas, los interruptores de luz, los dispositivos electrónicos y las encimeras.

Ten cuidado en espacios públicos cerrados

Mantén distanciamiento físico con las demás personas cuando estés en estos espacios. Esto es especialmente importante si tienes más riesgo de presentar un cuadro grave de la enfermedad. Algunas personas con la COVID-19 pueden contagiar el virus a otros aunque no presenten síntomas. Es posible que no sepan que tienen la COVID-19.

Evita los espacios cerrados donde haya mucha gente y los lugares cerrados que no tengan buena ventilación. Los virus respiratorios se contagian con más facilidad en espacios cerrados concurridos, especialmente los que tienen mala ventilación. Si es necesario que estés en estos espacios, puede ayudar usar una mascarilla y mejorar la ventilación.

Para reducir la probabilidad de contraer el virus que causa la COVID-19, mantén el aire interior en circulación. Esto significa abrir las ventanas, si es posible. Enciende ventiladores para que el aire salga por las ventanas. Si no es posible abrir las ventanas, considera usar filtros de aire. Además, enciende los extractores en el baño y la cocina. Podrías considerar también usar un filtro de aire portátil.

Cómo usar una mascarilla

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan el uso de mascarilla en espacios públicos cerrados si estás en un área donde hay una gran cantidad de personas hospitalizadas con la COVID-19. Recomiendan utilizar la mascarilla de uso regular que brinde la mayor protección posible, que se ajuste bien y que sea cómoda.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que las personas con sospecha o diagnóstico de gripe consideren usar una mascarilla cuando estén cerca de otras personas. Esto significa usar una mascarilla cuando estén cerca de las demás personas que viven en el hogar y cuando acudan a recibir atención médica. Las personas que no están enfermas y eligen usar una mascarilla pueden estar mejor protegidas si la usan cada vez que estén en lugares públicos y en su casa cerca de otras personas.

Limita el contacto durante la enfermedad

Evita estar cerca de cualquier persona que esté enferma. Evita el contacto cercano con personas que estén enfermas o tengan síntomas.

Si tienes síntomas de la COVID-19, haz una prueba para detectar la infección. O bien, acude a que te hagan una prueba cinco días después del contacto con el virus.

Si te enfermas, quédate en casa y aléjate de los demás, incluidas las mascotas, si es posible. Evita el trasporte público, los taxis y los viajes compartidos. No compartas platos, vasos, toallas, ropa de cama ni otros artículos de la casa.

La mejor manera de prevenir las alergias estacionales es evitar los desencadenantes conocidos. Si tienes alergia al polen, durante las épocas que hay mayor cantidad de polen en el aire, permanece en lugares cerrados con las puertas y las ventanas cerradas.

Usar mascarilla también puede ofrecer cierta protección contra las alergias estacionales. Las mascarillas pueden evitar la inhalación de algunas partículas más grandes de polen. Sin embargo, las partículas más pequeñas de polen pueden atravesar las mascarillas desechables. Es importante lavar una mascarilla reutilizable después de cada uso, ya que es posible que tenga partículas de polen.

Dec. 18, 2025