La neutropenia es la presencia de un número insuficiente de neutrófilos, que son un tipo de glóbulos blancos. Todos los glóbulos blancos ayudan al organismo a combatir las infecciones. Pero los neutrófilos son importantes para combatir ciertas infecciones, especialmente las causadas por bacterias.

Si tienes neutropenia, es probable que no lo sepas basándote en algún síntoma. A menudo, las personas descubren que tienen neutropenia cuando les hacen análisis de sangre por otros motivos.

Un único análisis de sangre que muestre niveles bajos de neutrófilos no significa necesariamente que tengas neutropenia. Estos niveles pueden variar de un día para otro. Por lo tanto, si un análisis de sangre muestra que tienes niveles bajos, hay que repetirlo. La repetición del análisis puede confirmar si tienes neutropenia.

La neutropenia puede aumentar el riesgo para infecciones. Cuando los niveles de neutrófilos son muy bajos, incluso las bacterias comunes de la boca y del tracto digestivo pueden causar enfermedades graves.

Existen diversas enfermedades y tratamientos que pueden causar neutropenia. Según la causa, la neutropenia se produce porque los neutrófilos se destruyen, se producen en menor número o se almacenan de manera irregular.

Algunas causas de la neutropenia son las siguientes:

La neutropenia no causa síntomas evidentes. Por lo tanto, es probable que por sí sola no te haga acudir a una revisión médica. Lo más frecuente es que los análisis de sangre llevados a cabo por otros motivos detecten la neutropenia.

Habla con el profesional de atención médica sobre el significado de los resultados de tus análisis. Necesitarás más de un análisis de sangre para confirmar si tienes neutropenia. También es posible que deban hacerte más análisis para averiguar cuál es la causa de la neutropenia. Un resultado de neutropenia combinado con los resultados de otras pruebas podría precisar la causa.

Si tienes neutropenia o tomas medicamentos que pueden causar esta enfermedad, llama inmediatamente al profesional de atención médica si observas síntomas de infección. Los síntomas de la infección pueden incluir:

  • Fiebre superior a 100,4 grados Fahrenheit (38 grados Celsius).
  • Escalofríos y sudoración.
  • Tos de aparición reciente o que empeora.
  • Falta de aire.
  • Congestión nasal.
  • Dolor de garganta o una nueva llaga en la boca.

Otros posibles síntomas de una infección son:

  • Ardor o dolor al orinar.
  • Rigidez en el cuello.
  • Diarrea o vómitos.
  • Un cambio en el color de la piel o hinchazón alrededor de cualquier zona donde la piel esté agrietada o cortada.
  • Flujo vaginal inusual.
  • Un nuevo dolor, incluso en la zona del estómago o el recto.

Si tienes neutropenia, puedes tomar medidas a fin de reducir el riesgo para infecciones. Algunas de estas medidas de seguridad son las siguientes:

  • Mantente al día con las vacunas, como las de la gripe y la COVID-19.
  • Lávate las manos con frecuencia.
  • Usa una mascarilla en lugares concurridos o cerca de personas enfermas.
  • Procura no mantener contacto estrecho con personas enfermas.
  • Cocina bien la carne y los huevos para destruir los gérmenes.
  • Lava bien las frutas y verduras crudas.
  • No compartas comida, vasos, utensilios ni cepillos de dientes.
July 02, 2025