Diagnóstico
Muchos tipos de trastornos pueden elevar el nivel de eosinófilos, incluidas ciertas infecciones, alergias y reacciones a los medicamentos. Al tratar de determinar si tienes síndrome hipereosinofílico, es probable que el médico te pregunte sobre tus antecedentes de viajes y los medicamentos que estés tomando, con el fin de descartar estas otras causas.
Pruebas de laboratorio
El médico también puede necesitar información de algunas de las siguientes pruebas de laboratorio:
- Análisis de sangre, para detectar afecciones autoinmunitarias, infecciones parasitarias o problemas con el hígado o los riñones
- Pruebas de alergia, para detectar alergias ambientales o alimenticias
- Pruebas de heces, para detectar infecciones parasitarias como la anquilostomiasis
- Prueba genética, para comprobar si hay una mutación genética que pueda producir el síndrome hipereosinofílico (HES, por sus siglas en inglés)
Pruebas por imágenes
Las pruebas por imágenes pueden incluir las siguientes:
- Rayos X, para comprobar el estado de tus pulmones
- Tomografía computarizada para detectar problemas en el pecho, el abdomen y la pelvis
- Ecocardiograma o resonancia magnética para evaluar la función cardíaca
Tratamiento
El objetivo del tratamiento del síndrome hipereosinofílico es reducir la cantidad de eosinófilos en el cuerpo y prevenir el daño en los tejidos, especialmente en el corazón. El tratamiento específico depende de los síntomas, la gravedad del trastorno y del origen del síndrome hipereosinofílico.
Si no tienes síntomas y tu recuento de eosinófilos es lo suficientemente bajo, es posible que no necesites ningún tratamiento, salvo un seguimiento estricto de cualquier cambio relacionado con el síndrome hipereosinofílico.
Medicamentos
Los corticosteroides sistémicos, como la prednisona, son el tratamiento de primera línea. Otras opciones de tratamiento incluyen:
- Hidroxiurea (Droxia, Hydrea, Siklos)
- Imatinib (Gleevec)
- Vincristina
Debido a que el síndrome hipereosinofílico (HES, por sus siglas en inglés) puede aumentar el riesgo de coágulos de sangre, es posible que te receten medicamentos anticoagulantes como la warfarina (Coumadin).
Estudios clínicos
Explora los estudios de Mayo Clinic que ensayan nuevos tratamientos, intervenciones y pruebas para prevenir, detectar, tratar o controlar esta afección.
Preparación para la consulta
Es posible que primero hables sobre los síntomas con tu médico de cabecera. Según tus síntomas, pueden remitirte a un especialista en enfermedades de la sangre (hematología), de afecciones del corazón (cardiólogo) o de alergias.
Considera la posibilidad de llevar a un pariente o amigo a la cita para que te ayude a recordar toda la información proporcionada.
La siguiente información te ayudará a prepararte para la cita y a saber qué esperar del médico.
Qué puedes hacer
Antes de la cita, prepara una lista de lo siguiente:
- Signos y síntomas, incluidos los que no parecen estar relacionados con el motivo de la cita
- Cualquier medicamento, incluidas vitaminas, plantas medicinales y medicamentos de venta libre que estés tomando y las dosis
- Información personal clave, incluido cualquier fuente de estrés importante o cambios recientes en tu vida
Para el síndrome hipereosinofílico, estas son algunas preguntas básicas para hacer al médico:
- ¿Voy a necesitar hacerme otros análisis?
- ¿Cuáles son las opciones de tratamiento?
- ¿Cuáles son los riesgos y beneficios de cada tratamiento?
- ¿Debería ver a otros especialistas? ¿Cuánto costará? ¿Lo cubrirá mi seguro?
- ¿Hay algún folleto u otro material impreso que me pueda llevar? ¿Qué sitios web me recomienda?
Qué esperar del médico
Es probable que el médico te haga varias preguntas. Prepárate para responderlas a fin de dejar tiempo más tarde para tratar otros temas que quieras abordar. Por ejemplo:
- ¿Cuándo comenzaste a tener los síntomas?
- ¿Tus síntomas son continuos u ocasionales?
- ¿Cuál es la gravedad de los síntomas?
- ¿Existe algo que, al parecer, mejore los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca empeorar los síntomas?
- ¿Has viajado fuera del país recientemente?
- ¿Tienes alguna alergia o afección de la piel?
- ¿Has estado expuesto a algún parásito como el anquilostoma?