Si no tienes síntomas de asma, tus vías respiratorias se encuentran despejadas. El aire puede entrar y salir fácilmente de los pulmones.

En cambio, cuando comienza un ataque de asma, los músculos lisos que rodean las vías respiratorias pueden contraerse. Las vías respiratorias, o los bronquios, de los pulmones pueden inflamarse e hincharse.

Esto dificulta el paso del aire a través de la abertura. La membrana mucosa que recubre los bronquios comienza a producir una mucosidad espesa que se acumula y bloquea aún más las vías respiratorias.

Esta vía respiratoria obstruida puede provocar un sonido sibilante y falta de aire, ambos signos y síntomas son característicos de un ataque de asma.

Dec. 14, 2021