Cuando respiras, el aire pasa por la garganta, atraviesa la tráquea e ingresa a los pulmones. La parte más angosta de esa vía es la parte posterior de la garganta.

Cuando estás despierto, los músculos mantienen esa vía relativamente abierta. Pero, cuando duermes, esos músculos se relajan, y la abertura se hace más angosta. El aire que pasa por esta abertura más angosta puede hacer que la garganta vibre. Eso es lo que causa los ronquidos, que muchas personas experimentan.

Pero, en algunas personas, la garganta se cierra tanto que no llega suficiente cantidad de aire a los pulmones. Cuando esto ocurre, el cerebro envía una alarma para abrir las vías respiratorias. Con mayor frecuencia, esto se asocia con un breve despertar del sueño. El cerebro reactiva rápidamente los músculos que mantienen la garganta abierta, el aire vuelve a pasar y el cerebro vuelve a dormir. Este trastorno se llama apnea obstructiva del sueño.

Sept. 14, 2019