Diagnósticos

Para diagnosticar un aneurisma de la arteria poplítea, un profesional de atención médica generalmente hace un examen físico y revisa las piernas para comprobar lo siguiente:

  • Hinchazón.
  • Sensibilidad.
  • Cambios en el color de la piel o en la temperatura de la parte inferior de la pierna y detrás de la rodilla.

Tal vez se te hagan preguntas sobre tus antecedentes médicos y tus hábitos de salud, como fumar.

Pruebas

Los estudios por imágenes pueden ayudar a confirmar un diagnóstico de aneurisma de la arteria poplítea. Las pruebas pueden ser las siguientes:

  • Ecografía dúplex. Esta prueba usa ondas de sonido para ver cómo fluye la sangre a través de las arterias y las venas. Es una manera simple y rápida de diagnosticar un aneurisma de la arteria poplítea. En esta prueba, un profesional de atención médica mueve con cuidado un dispositivo manual para ecografías sobre la piel que está detrás y alrededor de la rodilla.
  • Angiografía por tomografía computarizada o por resonancia magnética. Estas pruebas obtienen imágenes detalladas del flujo sanguíneo en las arterias. Antes de obtener las imágenes, se inyecta en un vaso sanguíneo una sustancia que se conoce como sustancia de contraste. La sustancia de contraste ayuda a que las arterias se vean más claramente.

Tratamientos

El tratamiento del aneurisma de la arteria poplítea depende de lo siguiente:

  • El tamaño del aneurisma.
  • Los síntomas.
  • Tu edad y salud general.

Es posible que el tratamiento incluya:

  • Controles médicos periódicos. Te harán revisiones médicas y ecografías frecuentes para controlar el aneurisma, especialmente si es pequeño.
  • Medicamentos. Se suele recetar una aspirina u otro medicamento anticoagulante a las personas con aneurisma de la arteria poplítea. Puede que los medicamentos tengan que administrarse por vía intravenosa. Quizás te den medicamentos para la presión arterial y el colesterol si tienes síntomas de enfermedad cardíaca.
  • Cirugía. En general, la cirugía abierta para reparar la arteria dañada se recomienda para un aneurisma de la arteria poplítea de cualquier tamaño que causa síntomas. Se suele hacer una cirugía cuando el aneurisma mide 0,8 pulgadas (2 centímetros) o más. A veces, se puede llevar a cabo un procedimiento menos invasivo, que se conoce como reparación endovascular. Durante este tratamiento, se coloca un estent dentro de la arteria poplítea para mantenerla abierta.