Prepara a los niños para la vacunación

A pocas personas les gustan las inyecciones. En el caso de los niños, el pinchazo de una vacuna puede ser realmente aterrador.

Los expertos de Mayo Clinic en Vida Infantil entienden este problema. Dedican su tiempo a cuidar y defender a los pacientes más jóvenes. Jennifer K. Rodemeyer, especialista certificada en Vida Infantil y directora del Programa de Vida Infantil de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota, ofrece consejos a los cuidadores para el momento de la vacunación.

Háblales para que te entiendan
Rodemeyer recomienda explicar a los niños que las vacunas ayudan al cuerpo a combatir ciertas enfermedades. Cuéntales que sentirán un pinchazo rápido con la inyección, pero que la sensación solo durará unos segundos.

Juega al médico en casa
Una manera de familiarizar a los niños con los procedimientos médicos es practicarlos en casa. Rodemeyer recomienda ofrecerles a los niños equipos médicos de juguete. Permíteles jugar con jeringas de juguete en la bañera o que usen el estetoscopio y las vendas con sus osos de peluche.

Avísales con anticipación
Hazles saber que irán al consultorio del médico para una vacuna o una cita, en lugar de llevarlos por sorpresa, afirma Rodemeyer. Hablar sobre lo que puede suceder ayuda a los niños a estar preparados.

Compartir con ellos lo que tú sabes también ayuda a que confíen más en ti. Sabrán que, a medida que surjan problemas médicos en el futuro, los mantendrás informados.

Ofrece opciones a los niños para empoderarlos
Puedes brindarle a tu hijo cierto sentido de control sobre la cita al darle opciones limitadas, como las siguientes:

  • ¿Te gustaría traer tu manta o tu oso de peluche?
  • ¿Te gustaría tomarme de la mano o sentarte en mi regazo?
  • ¿Qué actividad especial te gustaría hacer después de la cita?

Quédate cerca
Tener cerca a un adulto de confianza es reconfortante para los niños. También puede ayudar a que el procedimiento no tenga contratiempos. Pregúntale al equipo de atención médica sobre las posiciones que pueden ayudarte a consolar y tranquilizar a tu hijo y que, a su vez, les permiten realizar su trabajo.

Aboga por tu hijo
También puedes interceder por tu hijo. Muchos consultorios pediátricos cuentan con opciones para aliviar el dolor que ayudan a los niños. Pide una compresa fría vibratoria, un espray refrigerante o una crema anestésica. Si hay algo que ya funcionó con tu hijo, no temas pedirlo.

Encarga una tarea a los niños
Hazles saber la importancia de su participación para que tengan una sensación de control. Por ejemplo: Tu tarea más importante es mantener el brazo muy quieto para que el procedimiento se haga de la forma más rápida y segura posible.

Elógialos mucho
Cuando termine el procedimiento, hazle saber a tu hijo que hizo un gran trabajo y que sientes mucho orgullo. De esta forma, la cita terminará con un espíritu positivo. También le ayudará contar con esta experiencia para saber cómo afrontar futuras citas médicas.

  1. Rodemeyer JK (expert opinion). Mayo Clinic. Nov. 5, 2021.
CPT-20523679