Los suplementos nutricionales se usan para complementar una dieta saludable, no para reemplazarla. Si estás sano y comes una amplia variedad de alimentos, probablemente no necesites suplementos.
Pero a veces, los alimentos fortificados y los suplementos alimentarios pueden ayudar a proporcionar uno o más nutrientes. Por ejemplo, se aconseja a las personas que están encinta o intentando concebir que tomen vitaminas prenatales que contienen ácido fólico.
De lo contrario, se podría recomendar un suplemento si no consumes suficientes alimentos saludables o si tu dieta no es variada. También podrías necesitar un suplemento si tienes una alergia alimentaria, una intolerancia o una afección que te obligue a restringir ciertos alimentos o grupos de alimentos. Una dieta saludable es especialmente importante si tienes una enfermedad.
Pregúntale a tu equipo de atención médica o a un dietista si los suplementos podrían ser adecuados para ti. Asegúrate de preguntar sobre los posibles efectos secundarios de los suplementos que quieras probar. Pregunta también si los suplementos podrían interactuar con algún medicamento que estés tomando.
Nov. 21, 2023
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