La gastroenteritis es una inflamación del estómago y los intestinos que puede causar síntomas nada agradables, como diarrea acuosa, náuseas y vómitos. La gastroenteritis suele llamarse gripe estomacal. Las causas más comunes son:

  • Virus.
  • Alimentos o agua contaminados por bacterias o parásitos.
  • Efectos secundarios de los medicamentos.

Los síntomas comunes incluyen los siguientes:

  • Náuseas y vómitos.
  • Diarrea.
  • Calambres abdominales.
  • Fiebre baja (a veces).

Dependiendo de la causa de la inflamación, los síntomas pueden durar de un día a más de una semana.

Si sospechas que tienes gastroenteritis:

  • Bebe líquidos a sorbos. Bebe a sorbos una bebida deportiva o agua para evitar la deshidratación. Beber líquidos demasiado rápido puede empeorar las náuseas y los vómitos. Bebe pequeños sorbos a menudo durante un par de horas, en lugar de beber una gran cantidad de una vez.
  • Toma nota de lo que orinas. Debes orinar a intervalos regulares, y tu orina debe ser ligera y clara. Las micciones poco frecuentes de orina oscura son un signo de deshidratación. Los mareos y el aturdimiento también son síntomas de deshidratación. Si aparece alguno de estos síntomas y no puedes beber suficientes líquidos, busca atención médica.
  • Vuelve a comer poco a poco. Intenta comer pequeñas cantidades de comida con frecuencia si sientes náuseas. Si no, empieza a comer lentamente alimentos blandos y fáciles de digerir, como galletas saladas, tostadas, gelatina, plátanos, compota de manzana, arroz y pollo. Deja de comer si vuelven las náuseas. Evita la leche y los productos lácteos, la cafeína, el alcohol, la nicotina y los alimentos grasos o muy condimentados durante unos días.
  • Descansa mucho. La enfermedad y la deshidratación pueden debilitarte y cansarte.

Busca atención médica si ocurre algo de lo siguiente:

  • Los vómitos duran más de dos días.
  • La diarrea dura más de varios días.
  • La diarrea se vuelve sanguinolenta.
  • Fiebre superior a 102 grados Fahrenheit (39 grados Celsius).
  • Te mareas o te desvaneces al ponerte de pie.
  • Te sientes confundido.
  • Sientes dolor de estómago.

Si sospechas que tu hijo tiene gastroenteritis:

  • Anímalo a que descanse.
  • Cuando cesen los vómitos de tu hijo, empieza a ofrecerle pequeñas cantidades de una solución de rehidratación oral (Ceralyte, Enfalyte, Pedialyte). No le des solo agua o solo jugo de manzana. Beber líquidos demasiado deprisa puede empeorar las náuseas y los vómitos, así que intenta que de sorbos pequeños y frecuentes a lo largo de un par de horas, en lugar de que beba una gran cantidad de una sola vez. Prueba a utilizar un gotero de solución rehidratante en lugar de una botella o un vaso.
  • Introduce progresivamente alimentos blandos y fáciles de digerir, como tostadas, arroz, plátanos (bananas) y papas (patatas). Evita dar a tu hijo productos lácteos enteros, como leche y helados enteros, y alimentos azucarados, como refrescos y caramelos. Estos pueden empeorar la diarrea.
  • Si estás amamantando, deja que tu bebé tome el pecho. Si tu bebé toma biberón, ofrécele una pequeña cantidad de una solución de rehidratación oral o de leche de fórmula regular.

Busca atención médica si a tu hijo le sucede lo siguiente:

  • Está inusualmente somnoliento.
  • Vomita con frecuencia o vomita sangre.
  • Tiene diarrea con sangre.
  • Muestra signos de deshidratación, como boca y piel secas, sed acusada, ojos hundidos o llanto sin lágrimas. En un bebé, hay que estar atento al hundimiento de la fontanela en la parte superior de la cabeza y a pañales que permanezcan secos durante más de tres horas.
  • Es un bebé y tiene fiebre.
  • Es mayor de tres meses de edad y tiene fiebre de 102 grados Fahrenheit (39 grados Celsius) o más.

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Aug. 08, 2023