Infórmate más sobre el cáncer de tiroides con la doctora Mabel Ryder (endocrinóloga).
Soy la doctora Mabel Ryder, endocrinóloga de Mayo Clinic. En este video, hablaremos sobre los conceptos básicos del cáncer de tiroides: ¿qué es? ¿Quién puede tenerlo? Hablaremos de los síntomas. Asimismo, hablaremos del diagnóstico y del tratamiento. Ya sea que busques respuestas para ti o para un ser querido, estamos aquí para darte la mejor información disponible. ¿Qué es la tiroides? La tiroides es una glándula con forma de mariposa que se encuentra en la base del cuello. Es una glándula importante responsable de producir hormonas que controlan muchas funciones vitales del organismo, como el corazón y la frecuencia cardíaca, la presión arterial, la temperatura corporal y el peso. Cuando las células de la tiroides mutan, los cambios en el ADN hacen que crezcan y se multipliquen. Mientras que las células sanas normalmente mueren, estas células anormales siguen creciendo hasta formar un tumor. A veces, estas células invaden el tejido cercano a estas y pueden diseminarse o hacer metástasis en otras partes del cuerpo. Hay varios tipos de cáncer de tiroides. Algunos crecen de manera lenta. Otros pueden ser más agresivos. Debido a que las nuevas tecnologías nos permiten detectar tumores pequeños de tiroides, la tasa de incidencia de este tipo de cáncer ha aumentado. Sin embargo, la mayoría de estos tumores se puede tratar y el pronóstico es excelente para la mayoría de los pacientes.
Existen otros factores que pueden aumentar las probabilidades de contraer cáncer de tiroides. Las mujeres tienen tres veces más probabilidades de presentar este tipo de cáncer. El riesgo puede aumentar con la exposición a niveles altos de radiación, como la radioterapia en la cabeza o el cuello para tratar otros tipos de cáncer. Ciertos síndromes genéticos hereditarios también pueden influir. Los distintos tipos de cáncer de tiroides tienden a afectar a grupos etarios diferentes. El más común de este tipo cáncer es el cáncer papilar de tiroides. Si bien puede presentarse a cualquier edad, generalmente afecta a personas de 30 a 50 años. El cáncer folicular de tiroides suele afectar a personas de más de 50 años. El cáncer anaplástico de tiroides es un tipo de cáncer muy poco frecuente que suele aparecer en adultos de 60 años o más. Por último, tenemos el cáncer medular de tiroides. Si bien es poco frecuente, un 30 por ciento de los casos de este tipo de cáncer se asocia a síndromes genéticos que también pueden aumentar el riesgo de que aparezcan otros tumores.
Normalmente, el cáncer de tiroides no presenta ningún signo o síntoma en sus primeras etapas. A medida que crezca, es posible que notes un bulto palpable bajo la piel del cuello. Podrías notar cambios en la voz, como ronquera, o tener dificultad para tragar. Algunas personas pueden sentir dolor en el cuello o la garganta. O bien, pueden presentar hinchazón en los ganglios linfáticos del cuello. Si tienes alguno de estos problemas y sientes preocupación, programa una cita médica.
La mayoría de las veces, el diagnóstico de cáncer de tiroides comienza con un examen físico. El médico te palpará el cuello y la tiroides para ver si hay cambios físicos. Luego de este examen, generalmente se hacen análisis de sangre y ecografías. A partir de esta información, los médicos pueden decidir hacer una biopsia para extraer una pequeña muestra de tejido de la tiroides. En algunos casos, se pueden hacer pruebas genéticas para determinar si hay alguna causa hereditaria asociada. Si se te diagnostica cáncer de tiroides, es posible que se te hagan otras pruebas para que el médico pueda determinar si el cáncer se diseminó fuera de la tiroides y del cuello. Estas pruebas pueden incluir análisis de sangre para evaluar marcadores tumorales y pruebas por imágenes, como tomografías computarizadas, resonancias magnéticas o pruebas por imágenes nucleares, como una exploración de cuerpo entero con yodo radioactivo.
Por suerte, la mayoría de los cánceres de tiroides se puede combatir con tratamiento. Los tumores muy pequeños (de menos de 1 centímetro) tienen un bajo riesgo de proliferación o diseminación y, por consiguiente, podrían no necesitar tratamiento de inmediato. En esos casos, el médico puede recomendar la observación mediante análisis de sangre, ecografías y un examen físico una o dos veces al año. En muchas personas, un tumor pequeño (de menos de 1 centímetro) podría no llegar a crecer nunca ni requerir cirugía. En casos donde se necesita tratamiento, se suele hacer una intervención quirúrgica. Según el tipo de cáncer, es posible que el médico extirpe solo una parte de la tiroides (lo que se conoce como tiroidectomía). O bien, podría extirpar la glándula en su totalidad. Otros tratamientos pueden incluir terapia con hormona tiroidea, ablación con alcohol, yodo radioactivo, terapia con medicamentos selectivos, radioterapia externa y quimioterapia en algunos casos. En definitiva, el tipo de tratamiento dependerá de la etapa en que se encuentre el cáncer y el tipo de cáncer que tengas.
Si se te diagnostica cáncer de tiroides, es posible que sientas que no sabes qué debes hacer. Esto es normal; cada persona encuentra su propia manera de enfrentar un diagnóstico de cáncer. Sin embargo, hasta que descubras qué es lo que funciona mejor para ti, prueba hacer lo siguiente. Infórmate todo lo que puedas para poder tomar decisiones sobre tu atención médica. Conéctate con otras personas que hayan sobrevivido a esta afección. Hablar con personas que están en tu misma situación puede ser útil. Controla lo que puedas con respecto a tu salud. Toma medidas para mantener tu cuerpo saludable durante el tratamiento y después de este. Sigue una dieta saludable que incluya una variedad de frutas y verduras. Descansa lo suficiente. Asimismo, trata de hacer actividad física cuando puedas. Recibir un diagnóstico de cáncer puede causar temor, pero para tu tranquilidad, la mayoría de los casos de este tipo de cáncer se puede tratar. Si quieres aún más información acerca del cáncer de tiroides, mira nuestros otros videos relacionados o visita mayoclinic.org. Te deseamos lo mejor.