Investigación

La investigación y la innovación forman parte de la tradición de la Medicina Aeroespacial en Mayo Clinic desde sus inicios en la década de 1930. En Mayo Clinic, los fisiólogos y los científicos especializados en altura desarrollaron varios objetos vitales para la seguridad de los pilotos militares en la era de la Segunda Guerra Mundial. Antes de las cabinas presurizadas de los aviones para vuelos comerciales, las aeronaves volaban a alturas relativamente bajas para evitar situaciones de poco oxígeno. Nuestros científicos fabricaron una máscara de oxígeno para que pilotos y pasajeros la usaran durante el vuelo, a fin de poder viajar a mayor altura y por encima de turbulencias causadas por el tiempo. Esto hizo los vuelos más tranquilos y tolerables para los viajeros.

Una variedad de inventos y avances creados por los investigadores de Mayo Clinic fueron clave en la guerra y para fomentar la seguridad de la aviación en las siguientes décadas.

Actualmente, los médicos e investigadores de Mayo están estudiando medios innovadores que detecten y combatan la desorientación espacial, las anomalías vestibulares y nuevos sistemas para suministrar oxígeno. Estos sistemas se van a instalar en aeronaves desarrolladas por prestigiosos fabricantes.

Otros estudios se centran en la adaptación del ser humano a alturas elevadas y lugares remotos. Este trabajo puede ayudar a reducir los efectos del mal de atura y permitir viajar por aire de forma segura a altitudes que superan los 40 000 pies (12 100 metros). A esos se los denomina vuelos a baja presión atmosférica.

Los investigadores aeroespaciales de Mayo Clinic están promoviendo varios proyectos aplicables en la aviación de altura elevada y además programas para viajes espaciales. Entre estos se incluyen los siguientes: