Los tatuajes se han convertido en una práctica más común que antes; sin embargo, no debes tomar los riesgos a la ligera. Entender las precauciones de seguridad básicas y el cuidado posterior.

Escrito por el personal de Mayo Clinic

Podrás ser el orgulloso dueño de un tatuaje nuevo en cuestión de horas — sin embargo, no permitas que lo fácil del proceso te impida pensar cuidadosamente sobe el arte corporal permanente. Antes de hacerte un tatuaje, asegúrate de que sabes lo que implica y cómo reducir los posibles riesgos.

Un tatuaje es una marca permanente o un diseño hecho en tu piel con pigmentos insertados por medio de punciones en la capa superior de la piel. Normalmente, el artista del tatuaje utiliza una máquina manual que actúa muy parecido a una máquina de coser, con una o más agujas que perforan la piel repetidas veces. Con cada punción, las agujas insertan diminutas gotitas de tinta.

El procedimiento — que se realiza sin anestesia — provoca un pequeño sangrado y dolor de leve a potencialmente significativo.

Los tatuajes atraviesan la piel, lo que significa que es posible tener infecciones en la piel y otras complicaciones, incluidas las siguientes:

  • Reacciones alérgicas. Las tintas de los tatuajes, especialmente las de color rojo, verde, amarillo y azul, pueden causar reacciones alérgicas en la piel, como sarpullido con picazón en la zona del tatuaje. Esto puede suceder incluso años después de haberte hecho el tatuaje.
  • Infecciones en la piel. Una infección en la piel es posible después de hacerse un tatuaje.
  • Otros problemas de la piel. A veces, se puede formar una zona de inflamación, llamada granuloma, alrededor de la tinta del tatuaje. Los tatuajes también pueden provocar queloides, áreas elevadas causadas por un crecimiento excesivo del tejido cicatrizal.
  • Enfermedades transmitidas por la sangre. Si el equipo que se utiliza para crear tu tatuaje está contaminado con sangre infectada, puedes contraer varias enfermedades de transmisión sanguínea, incluidas las infecciones por Staphylococcus aureus resistente a la meticilina, la hepatitis B y la hepatitis C.
  • Complicaciones en las resonancias magnéticas. En muy pocas ocasiones, los tatuajes o el maquillaje permanente podrían provocar hinchazón o ardor en las zonas afectadas durante las resonancias magnéticas. En algunos casos, los pigmentos del tatuaje pueden interferir en la calidad de la imagen.

Podrían necesitarse medicamentos u otros tratamientos si tienes una reacción alérgica a la tinta del tatuaje o si contraes una infección u otros problemas en la piel cerca del tatuaje.

Antes de tatuarte, piénsalo bien. Si no estás seguro o te preocupa que te puedas arrepentir, tómate más tiempo para pensarlo. No dejes que te hagan sentir presionado para realizarte un tatuaje, y no te tatúes si te encuentras bajo la influencia del alcohol o drogas.

Elige cuidadosamente la ubicación del tatuaje. Considera si quieres la opción de esconder tu tatuaje bajo la ropa. También ten en cuenta que el aumento de peso, incluido el aumento de peso durante el embarazo, puede distorsionar el tatuaje o afectar su apariencia.

Para garantizar que tu tatuaje se aplique de forma segura, pregunta lo siguiente:

  • ¿Quién hace los tatuajes? Ve a un estudio de tatuajes reconocido que emplee personas adecuadamente capacitadas. Considera que los requisitos de las regulaciones y las normas para los permisos varían dependiendo del estado. Verifica con el departamento de salud de tu localidad, ciudad o estado sobre los permisos y las regulaciones locales.
  • ¿El artista del tatuaje utiliza guantes? Asegúrate de que el artista del tatuaje se lave las manos y utilice un nuevo par de guantes de protección para cada procedimiento.
  • ¿El artista del tatuaje utiliza el equipo adecuado? Asegúrate de que el artista del tatuaje retire la aguja y los tubos de los empaques sellados antes de que comience tu procedimiento. Los pigmentos, charolas o contenedores tampoco deberán estar usados.
  • ¿El artista del tatuaje esteriliza el equipo no desechable? Asegúrate de que el artista utiliza un esterilizador (autoclave) para el equipo no desechable entre cada cliente. Los instrumentos y suministros que no puedan esterilizarse en la autoclave — incluyendo las agarraderas de los cajones, las mesas y los fregaderos — deben desinfectarse con un desinfectante o cloro comercial después de cada uso.

El cuidado de tu nuevo tatuaje depende del tipo y la magnitud del trabajo realizado. No obstante, normalmente, tendrás que tener los siguientes cuidados:

  • Mantén la piel tatuada limpia. Usa agua y jabón común con suavidad. Mientras te duchas, evita los chorros de agua directos sobre la piel recién tatuada. Para secar el área, da toques suaves, no frotes.
  • Usa humectante. Aplica un humectante suave sobre la piel tatuada, varias veces al día.
  • Evita la exposición al sol. No expongas el área tatuada al sol durante por lo menos algunas semanas.
  • Evita nadar. Mantente fuera de piscinas, tinas de agua caliente, ríos, lagos y otras masas de agua mientras tu tatuaje se cura.
  • Elije la ropa con cuidado. No uses nada que podría adherirse al tatuaje.
  • Espera hasta 2 semanas para que se cure. No quites las costras, esto aumenta el riesgo de infección y puede dañar el diseño y provocar cicatrices.

Si piensas que tu tatuaje podría estar infectado o te preocupa que no se esté curando correctamente, comunícate con tu médico. Si tu tatuaje no es lo que esperabas y te interesa quitártelo, consulta a tu dermatólogo acerca de la cirugía láser u otras opciones para la remoción de tatuajes.

Feb. 25, 2022