Al limpiar los champiñones, no los sumerja en agua porque van a absorber el agua como una esponja. En su lugar, limpia los champiñones con un paño húmedo o un papel absorbente resistente.
Calienta la asadera (parrilla). Coloca la parrilla a una distancia de 4 pulgadas (10 cm) de la fuente de calor. Rocía ligeramente una fuente de horno de vidrio con aceite en aerosol. Coloca los champiñones en la fuente, con el lado del tallo (branquia) cortado hacia arriba.
En un bol pequeño, bate el vinagre, el azúcar morena, el romero y el ajo. Vierte la mezcla sobre los champiñones. Déjalo a un lado de 5 a 10 minutos para marinar.
Asa (a la parrilla) los champiñones, dándolos vuelta una vez, hasta que estén tiernos, unos 4 minutos de cada lado. Espolvorea el queso rallado sobre cada champiñón y continúa asando (a la parrilla) hasta que el queso se derrita. Coloca en platos individuales.
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