Diagnóstico
No existe una única prueba para detectar la fiebre reumática. El diagnóstico de fiebre reumática se basa en los antecedentes médicos, un examen físico y los resultados de determinadas pruebas.
Pruebas
Las pruebas que se pueden hacer para detectar la fiebre reumática son las siguientes:
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Análisis de sangre. Se pueden hacer análisis de sangre para verificar si existen signos de inflamación en el cuerpo. Entre estos análisis se encuentran los de la proteína C reactiva y los de la velocidad de sedimentación globular, también conocida como tasa de sedimentación.
En algunos casos, la bacteria estreptocócica real no se encuentra en la sangre ni en los tejidos de la garganta. Por lo que se puede hacer otro análisis de sangre para buscar las proteínas que están relacionadas con esta bacteria. Estas proteínas se llaman anticuerpos.
- Electrocardiograma (o electrocardiografía). Esta prueba muestra cómo late el corazón. Puede diagnosticar los latidos irregulares. Un profesional de atención médica puede verificar los patrones de las señales del electrocardiograma para buscar signos de inflamación del corazón.
- Ecocardiograma. Se utilizan ondas sonoras para producir imágenes del corazón en movimiento. El ecocardiograma permite ver la estructura del corazón y la forma en que la sangre fluye a través de este.
Tratamiento
Los objetivos de tratamiento para la fiebre reumática son los siguientes:
- Tratar la infección
- Aliviar los síntomas
- Controlar la inflamación
- Evitar que la afección reaparezca
Medicamentos
La fiebre reumática se trata con medicamentos como los siguientes:
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Antibióticos. Se suele recetar penicilina u otro antibiótico para combatir las bacterias estreptocócicas.
Luego de completar el primer ciclo de tratamiento con antibióticos, se puede recetar otro ciclo más. Esto evita que la fiebre reumática reaparezca. Es posible que un niño deba seguir tomando antibióticos durante 5 años o hasta los 21 años para evitar que reaparezca la fiebre reumática, optando siempre por el período más largo.
Es probable que las personas que han tenido inflamación del corazón durante la fiebre reumática deban seguir tomando antibióticos durante 10 años o más.
- Medicamentos antiinflamatorios. La aspirina o el naproxeno (Naprosyn, Naprelan, Anaprox DS) pueden ayudar a reducir la inflamación, la fiebre y el dolor. Si los síntomas son graves o no mejoran con los medicamentos antiinflamatorios, es posible que te receten un corticoide. No les des aspirina a los niños, a no ser que un profesional de atención médica te lo indique.
- Medicamentos anticonvulsivos. Se pueden usar medicamentos, como el ácido valproico o la carbamazepina (Carbatrol, Tegretol y otros) para tratar los movimientos involuntarios graves causados por la corea de Sydenham.
Es importante acudir a controles de salud regulares luego de haber tenido fiebre reumática. Es posible que el daño cardíaco causado por la fiebre reumática no aparezca hasta dentro de muchos años o incluso décadas. Informa siempre al profesional de atención médica sobre cualquier antecedente de fiebre reumática.
Estudios clínicos
Explora los estudios de Mayo Clinic que ensayan nuevos tratamientos, intervenciones y pruebas para prevenir, detectar, tratar o controlar esta afección.
Estilo de vida y remedios caseros
En el caso de una persona con fiebre reumática, el proveedor de atención médica podría recomendar reposo en cama. Puede indicarte que restrinjas tu actividad hasta que los síntomas mejoren.
Preparación para la consulta
Programa una cita para un control médico si aparecen síntomas de fiebre reumática. Si hay daño en el corazón, es posible que se te remita a un cardiólogo, que es un médico especialista en enfermedades cardíacas.
A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte para la cita médica.
Qué puedes hacer
Cuando programes la cita, pregunta si es necesario algún tipo de preparación especial. Por ejemplo, es posible que te digan que no comas ni bebas durante un tiempo antes de ciertos análisis de sangre. Prepara una lista de lo siguiente:
- Síntomas, incluso aquellos que no parecen estar relacionados con el motivo de la cita
- Información personal importante, lo que incluye situaciones de mucho estrés, cambios recientes en tu vida y antecedentes médicos familiares
- Todos los medicamentos, las vitaminas u otros suplementos que tomas y sus dosis.
- Preguntas para hacerle al equipo de atención médica
Estas son algunas preguntas básicas que puedes hacerle al equipo de atención médica acerca de la fiebre reumática:
- ¿Cuáles son las posibles causas de los síntomas?
- ¿Qué pruebas se necesitan?
- ¿Qué tratamiento se necesita?
- ¿Cuáles son las opciones para el tratamiento principal que me sugiere?
- Mi hijo o yo tenemos otras enfermedades. ¿Cuál es la mejor manera de controlarlas de manera conjunta?
- ¿Debo restringir mi alimentación o mi actividad física de alguna forma?
- ¿Deberíamos consultar con un especialista?
- ¿Hay algún folleto u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
No dudes en hacer otras preguntas.
Qué esperar del médico
Es probable que el equipo de atención médica haga preguntas, como las siguientes:
- ¿Cuándo comenzaron los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca mejorar los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca empeorarlos?
- ¿Están los síntomas presentes todo el tiempo o aparecen y desaparecen?
- ¿Se ha resfriado o engripado alguien de tu familia últimamente?
- ¿Hay algún antecedente de amigdalitis estreptocócica o escarlatina?
- Si la respuesta es afirmativa, ¿tomaste todos los antibióticos como se te recetó?