Panorama general
La peste es una enfermedad grave, causada por un germen llamado Yersinia pestis. Los gérmenes mayormente viven en roedores pequeños y sus pulgas. Para los humanos, la forma más común de contagiarse es por una picadura de pulga.
La peste es una enfermedad rara. La enfermedad ocurre mayormente en unos pocos países del mundo. En los Estados Unidos, afecta a unas pocas personas por año en áreas rurales o semirrurales de los estados del oeste.
Normalmente puede tratarse con antibióticos. Si no se trata, suele ser mortal.
Se considera un arma biológica en potencia. El gobierno de los Estados Unidos tiene preparados planes y tratamientos si se llegase a usar esta enfermedad como arma.
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Síntomas
Existen tres tipos de peste. Los síntomas varían según el tipo.
Peste bubónica
La peste bubónica causa hinchazón de los ganglios linfáticos, pequeños filtros en forma de frijol en el sistema inmunitario. A un ganglio linfático hinchado se lo llama un bubón. La palabra “bubónica” hace referencia a esta característica de la enfermedad.
Cuando una persona tiene peste bubónica, aparecen bubones en las axilas, la ingle o el cuello. Los bubones pueden ser dolorosos o no causar ningún dolor. Su tamaño varía de algo menos de media pulgada (1 centímetro) a unas 4 pulgadas (10 centímetros).
Otros síntomas de la peste bubónica pueden ser:
- Fiebre alta repentina y escalofríos
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Malestar general
- Debilidad
- Dolor muscular
- Muy rara vez, llagas en la piel
Peste septicémica
La peste septicémica se produce cuando las bacterias de la peste se multiplican en el torrente sanguíneo. Tal vez no haya bubones.
Los primeros síntomas son muy generales, por ejemplo:
- Fiebre alta repentina y escalofríos
- Debilidad extrema
- Dolor de estómago, diarrea y vómitos
Pueden aparecer síntomas más graves con la enfermedad avanzada y la falla de los órganos, como los siguientes:
- Sangrado de la boca, la nariz, el recto o debajo de la piel.
- Signos de choque, como convulsión, sarpullido y presión arterial baja.
- Ennegrecimiento y muerte del tejido, conocidos como gangrena, principalmente en los dedos de las manos y los pies, las orejas y la nariz.
Peste pulmonar
La peste pulmonar afecta los pulmones. La enfermedad puede comenzar en los pulmones o puede diseminarse de los ganglios linfáticos infectados a los pulmones. Los síntomas pueden aparecer pocas horas después de la exposición y empeorar rápidamente.
Los síntomas pueden incluir los siguientes:
- Fiebre alta repentina y escalofríos.
- Tos, con sangre en la mucosidad.
- Dificultad para respirar o respiración irregular.
- Dolor en el pecho.
- Malestar estomacal y vómitos.
- Dolor de cabeza.
- Debilidad.
Si no se inicia el tratamiento el primer día, la enfermedad evoluciona rápidamente hacia una insuficiencia pulmonar, un choque y la muerte.
Cuándo consultar con el médico
Busca atención médica de inmediato si repentinamente tienes fiebre alta.
Busca atención médica de emergencia si tienes fiebre alta repentina u otros síntomas y vives en un área donde hubo casos de peste. En el oeste de los Estados Unidos, la mayoría de los casos fueron en Arizona, California, Colorado y Nuevo México.
También hubo casos en África, Asia y Latinoamérica. Entre los países con casos frecuentes se incluyen Madagascar, la República Democrática del Congo y Perú.
Causas
La peste es causada por una bacteria llamada Yersinia pestis. La bacteria circula en poblaciones de animales pequeños y sus pulgas.
En el oeste de los Estados Unidos, entre estos animales se incluyen los siguientes:
- Ratas, ratones y topillos.
- Ardillas.
- Conejos.
- Perros de la pradera.
- Marmotas y ardillas listadas.
Otros animales pueden contraer la peste al comer animales pequeños que tienen la enfermedad o al infectarse con sus pulgas. Entre estos se incluyen los siguientes:
- Gatos y perros domésticos.
- Coyotes.
- Gatos salvajes.
La enfermedad en los humanos
Las personas tienen más probabilidades de contraer la peste por la picadura de una pulga. Seguramente las pulgas provengan de pequeños animales salvajes o de mascotas.
También es posible contraer la peste por contacto directo con los tejidos de un animal enfermo. Por ejemplo, un cazador puede contraerla al despellejar o manipular un animal con esta enfermedad.
La peste pulmonar puede trasmitirse de animales a humanos o de humanos a humanos. Cuando una persona o un animal tose o estornuda, diminutas gotas en el aire pueden trasmitir la bacteria. Las personas pueden infectarse al inhalar las gotitas o tocar la mucosidad expulsada al toser.
Factores de riesgo
El riesgo de contraer peste es muy bajo. En todo el mundo, solo unos miles de personas se contagian de peste cada año. En los Estados Unidos, un promedio de siete personas la contraen cada año.
Ubicación
Se informaron casos de peste en casi todas partes del mundo. Los lugares más comunes son Madagascar, la República Democrática del Congo y Perú. En Madagascar, suele haber un brote de peste cada año.
Se informaron casos de peste en el oeste de los Estados Unidos, con más frecuencia en Arizona, California, Colorado y Nuevo México.
La enfermedad persiste sobre todo en poblaciones de roedores y en sus pulgas, en zonas rurales y semirrurales. También se ha dado en ciudades con hacinamiento, higiene deficiente o grandes poblaciones de ratas.
Empleos
Las personas corren riesgo de contraer la peste si trabajan al aire libre en áreas donde suele haber animales infectados con la enfermedad. Las personas que trabajan en clínicas veterinarias en estas áreas también corren riesgo de entrar en contacto con gatos y perros domésticos que tengan la enfermedad.
Pasatiempos
Las actividades como acampar, cazar o practicar senderismo en áreas donde hay animales portadores de la peste pueden aumentar el riesgo de que te pique una pulga infectada.
Armas biológicas
El Gobierno de los Estados Unidos considera la peste como una posible arma biológica. Existen pruebas de que se utilizó o desarrolló como arma en el pasado. El Gobierno estadounidense tiene pautas para tratar y prevenir la peste utilizada como arma.
Complicaciones
Las complicaciones de la peste pueden incluir las siguientes:
- Gangrena. Se pueden formar coágulos en los vasos sanguíneos diminutos de los dedos de las manos y los pies, la nariz y las orejas. Esto puede hacer que los tejidos mueran. Es necesario extraer el tejido muerto.
- Meningitis. En raras ocasiones, la peste puede causar hinchazón y enfermedad de los tejidos protectores que rodean el cerebro y la médula espinal. Esta afección se denomina meningitis.
- Peste faríngea. En casos poco frecuentes, la enfermedad puede presentarse en los tejidos que se encuentran detrás de la cavidad nasal y la boca, lo que se denomina faringe. Esto se conoce como peste faríngea.
Muerte
El riesgo de muerte en personas con todos los tipos de peste en los Estados Unidos ronda el 11 %.
La mayoría de las personas con peste bubónica sobreviven si reciben un diagnóstico y tratamiento inmediatos. La muerte es más frecuente en la peste septicémica, ya que es más difícil de diagnosticar y empeora rápidamente. El tratamiento se puede retrasar involuntariamente.
La peste pulmonar es grave y empeora rápidamente. El riesgo de muerte es alto si el tratamiento no se administra dentro de las 24 horas de que comenzaron los síntomas.
Prevención
Los científicos están trabajando para crear una vacuna, ya que actualmente no hay ninguna. Los antibióticos pueden ayudar a prevenir la infección si existe la posibilidad de que hayas estado expuesto a la peste.
Para prevenir la diseminación de la peste pulmonar, se aísla a las personas que tienen la enfermedad durante el tratamiento. Los trabajadores de atención médica deben usar máscaras protectoras, batas, guantes y gafas de protección al tratar a una persona con peste pulmonar.
Reducir el riesgo de exposición
Si vives o pasas tiempo al aire libre, donde hay peste:
- Mantén tu casa a prueba de roedores. Limpia las áreas donde puedan hacer nidos, como pilas de ramas, piedras, leña y desechos. No dejes comida para mascotas en áreas de fácil acceso para los roedores. Si ves que hay roedores en tu casa, toma medidas para eliminarlos.
- Protege a tus mascotas. Usa medicamentos para controlar las pulgas con tus mascotas. Habla con tu veterinario para conocer las mejores opciones. Si tu mascota se enferma, busca tratamiento de inmediato. No dejes que las mascotas duerman contigo si están afuera, en áreas donde hay peste.
- Protección contra animales. Cuando manejes animales muertos, usa guantes para evitar el contacto entre tu piel y el animal. Llama al departamento de salud local si te preocupa el retiro de un animal muerto.
- Usa repelente para insectos en la piel y la ropa. Cuando estés al aire libre, usa repelentes de insectos registrados en la Agencia de Protección Ambiental de los EE. UU, como los que contienen N, N-dietil-meta-toluamida o DEET, picaridina, IR3535, aceite de eucalipto de limón, para-mentano-3,8-diol o 2-undecanona. No uses un rociador directamente en la cara. No uses productos con aceite de eucalipto de limón o para-mentano-3,8-diol en niños menores de 3 años. No uses repelente para insectos en niños menores de 2 meses.