Diagnóstico

Los exámenes de detección son importantes en la detección de pólipos antes de que se vuelvan cancerosos. Estos análisis también pueden ayudar a detectar el cáncer colorrectal en sus primeras etapas, cuando tienes una gran probabilidad de recuperación.

Entre los exámenes de detección se incluyen los siguientes:

  • Colonoscopia, en la que se introduce en el recto una pequeña sonda con una luz y una cámara para observar el colon. Si se encuentran pólipos, es posible que el proveedor de atención médica los extirpe de inmediato o tome muestras de tejido para su análisis.
  • Colonoscopia virtual, un examen que usa una tomografía computarizada para observar el colon. Se requiere la misma preparación intestinal para la colonoscopia virtual y para la tradicional. Si durante la tomografía computarizada se encuentra un pólipo, será necesario repetir la preparación intestinal para hacer una colonoscopia y examinar y extirpar el pólipo.
  • Sigmoidoscopia flexible. Al igual que en la colonoscopia, se usa una pequeña sonda con una luz y una cámara, pero solo se examina el último tercio del colon, también llamado el sigmoide. La mayor parte del colon no se revisa con este examen de detección, por lo que es posible que no se vean algunos pólipos y tipos de cáncer.
  • Pruebas de heces. Estas pruebas buscan la presencia de sangre en las heces o evalúan el ADN de las heces en busca de indicios de un pólipo o cáncer de colon. Si la prueba de heces es positiva, necesitarás una colonoscopia después.

Tratamiento

Es probable que el proveedor de atención médica extirpe todos los pólipos que se hayan descubierto durante un examen intestinal. Entre las opciones de extirpación, se incluyen las siguientes:

  • Polipectomía. En la etapa inicial, cuando son más pequeños, los pólipos pueden extirparse al introducir una sonda en el recto con un dispositivo que corta el tumor.
  • Cirugía de invasión mínima. Los pólipos que son demasiado grandes o que no se pueden extirpar de manera segura durante el examen de detección suelen extirparse quirúrgicamente. Por lo general, esto se lleva a cabo insertando un instrumento llamado laparoscopio en el abdomen para extirpar la parte cancerosa del intestino.
  • Proctocolectomía total. Si tienes un síndrome hereditario poco frecuente, como la poliposis adenomatosa familiar, es posible que necesites una cirugía para extirpar el colon y el recto. Esta cirugía puede protegerte de desarrollar un tipo de cáncer que pone en riesgo la vida.

Algunos tipos de pólipos de colon son más proclives a convertirse en cancerosos que otros. Un proveedor de atención médica que analiza muestras de tejido observará el tejido del pólipo con el microscopio para determinar si podría ser canceroso.

Atención de seguimiento

Si has tenido un pólipo adenomatoso o un pólipo serrado, tienes un riesgo mayor de desarrollar cáncer de colon. El nivel de riesgo depende del tamaño, la cantidad y las características de los pólipos adenomatosos extirpados.

Necesitarás exámenes de detección de seguimiento para los pólipos. Es probable que el proveedor de atención médica te recomiende una colonoscopia en los siguientes casos:

  • En 5 a 10 años, si tuviste solo uno o dos adenomas pequeños.
  • En 3 a 5 años, si tuviste tres o cuatro adenomas.
  • En 3 años, si tuviste de 5 a 10 adenomas, adenomas de más de 10 milímetros o ciertos tipos de adenomas.
  • En el plazo de 6 meses, si tuviste múltiples adenomas, un adenoma muy grande o un adenoma que se tuvo que extirpar por partes.

Preparación para la colonoscopia

Es muy importante limpiar el colon por completo antes de una colonoscopia. Si quedan heces en el colon y bloquean la visión del proveedor de atención médica de la pared del colon, es probable que necesites realizarte otra colonoscopia antes de lo habitual para asegurarte de que se hayan descubierto todos los pólipos.

Luego de una preparación adecuada del colon, las deposiciones deben aparecer en forma de líquido claro. Pueden estar ligeramente amarillas o teñidas de verde, según los líquidos que se hayan consumido durante la preparación. Si tienes problemas con la preparación del colon o crees que no se te ha limpiado del todo, debes decírselo a tu proveedor de atención médica antes de empezar la colonoscopia. Algunas personas necesitan pasos adicionales antes de someterse a una colonoscopia.

Preparación para la consulta

Es posible que te remitan a un gastroenterólogo, que es un proveedor de atención médica especializado en enfermedades digestivas.

Qué puedes hacer

  • Ten en cuenta cualquier restricción previa a la consulta, como por ejemplo no comer alimentos sólidos el día antes.
  • Anota los síntomas que presentes, incluidos aquellos que quizás no parezcan estar relacionados con el motivo de la cita médica.
  • Haz una lista de todos los medicamentos, vitaminas o suplementos que tomas.
  • Anota información médica clave, e incluye otras afecciones que tengas.
  • Anota información personal importante, e incluye cualquier cambio o situación estresante reciente en tu vida.
  • Pídele a un familiar o un amigo que te acompañe para ayudarte a recordar lo que diga el proveedor de atención médica.
  • Anota todas las preguntas que quieras hacerle al proveedor de atención médica.

Preguntas para hacerle al médico

  • ¿Cuál es la causa más probable de mis síntomas?
  • ¿Qué tipo de pruebas necesito hacerme? ¿Estas pruebas requieren alguna preparación especial?
  • ¿Qué tratamientos hay disponibles?
  • ¿Cuáles son las probabilidades de que estos pólipos sean malignos?
  • ¿Es posible que tenga un trastorno genético que genere pólipos de colon?
  • ¿Qué tipo de exámenes de seguimiento necesito hacerme?
  • ¿Debería eliminar algún alimento de mi dieta o agregarlo?
  • Tengo otras enfermedades. ¿Cómo puedo controlarlas de manera conjunta?

Además de las preguntas que preparaste para el proveedor de atención médica, no dudes en hacer otras durante la cita.

Qué esperar del médico

Es probable que el proveedor de atención médica te haga algunas preguntas. Estar listo para responderlas puede dejar tiempo para revisar los puntos a los que quieras dedicar más tiempo. Es posible que te pregunte lo siguiente:

  • ¿Cuándo comenzaste a tener los síntomas y cuál era su intensidad?
  • ¿Los síntomas han sido continuos u ocasionales?
  • ¿Has tenido tú o ha tenido alguien de tu familia cáncer de colon o pólipos en el colon?
  • ¿Ha tenido alguien de tu familia otros tipos de cáncer en el tracto digestivo, el útero, los ovarios o la vejiga?
  • ¿Cuánto fumas y cuánto alcohol bebes?