Amnesia

Diagnóstico

Para diagnosticar amnesia, es necesario hacer una evaluación integral. Puede descartar otras posibles causas de pérdida de memoria, como la enfermedad de Alzheimer, otros tipos de demencia, depresión o un tumor cerebral.

Historia clínica

La evaluación comienza con los antecedentes médicos detallados. Dado que posiblemente la persona que tiene pérdida de memoria no pueda brindar información exhaustiva, por lo general un familiar, un amigo u otro cuidador lo hace.

Es posible que el proveedor de atención médica te haga varias preguntas para comprender la pérdida de memoria. Estos son algunos de los temas que pueden abordarse:

• El tipo de pérdida de memoria y si es reciente o de larga data
• Cuándo empezaron los problemas de memoria y cómo avanzaron
• Los factores que desencadenaron los problemas de memoria, como lesiones en la cabeza, accidentes cerebrovasculares o cirugías
• Antecedentes familiares, en especial, de enfermedades neurológicas
• Consumo de alcohol y drogas ilícitas
• Otros síntomas, como confusión, problemas con el lenguaje, cambios de personalidad o incapacidad para cuidar de ti mismo
• Antecedentes de convulsiones, dolor de cabeza, depresión o cáncer

Exploración física

El examen físico puede incluir un examen neurológico para verificar los reflejos, la función sensorial y el equilibrio.

Pruebas cognitivas

El examen normalmente incluye pruebas relacionadas con el pensamiento y la capacidad de juicio, y con la memoria a corto y a largo plazo. Se te harán preguntas sobre tus conocimientos de información general, como el nombre del presidente actual, información personal y eventos del pasado. Es posible que te pidan que repitas una lista de palabras.

La evaluación de la memoria puede ayudar a determinar el grado de pérdida de memoria y aportar ideas sobre qué tipo de ayuda necesitas.

Pruebas de diagnóstico

El proveedor de atención médica también podría indicar:

• Pruebas por imágenes, como una resonancia magnética y una tomografía computarizada, para revisar si hay daño cerebral o cambios como reducción del tamaño del cerebro
• Análisis de sangre para detectar infecciones, deficiencias nutricionales u otros problemas
• Un electroencefalograma para comprobar la presencia de actividad convulsiva

Tratamiento

El tratamiento de la amnesia se centra en estrategias para ayudar a compensar el problema de memoria. También es importante tratar las enfermedades subyacentes que causan la amnesia.

Terapia ocupacional

Es posible que trabajes con un terapeuta ocupacional para obtener información nueva que reemplace la que se perdió, o que uses recuerdos intactos como base para asimilar información nueva.

El entrenamiento de la memoria también puede consistir en estrategias para organizar la información, para que sea más fácil recordar y para comprender mejor las conversaciones con los demás.

Asistencia tecnológica

A muchas personas con amnesia les resulta útil usar tecnología inteligente, como teléfonos inteligentes o tabletas portátiles. Con algo de entrenamiento y práctica, incluso las personas con amnesia grave pueden usar organizadores electrónicos como ayuda para realizar las tareas cotidianas. Por ejemplo, los teléfonos inteligentes se pueden programar para recordarles acontecimientos importantes o que deben tomar los medicamentos.

Los recursos menos tecnológicos que ayudan a la memoria incluyen cuadernos, calendarios de pared, pastilleros y fotografías de personas y lugares.

Medicamentos o suplementos

Actualmente, no existen medicamentos para tratar la mayoría de los tipos de amnesia.

Si el síndrome de Wernicke-Korsakoff causa la amnesia, el tratamiento puede ayudar a prevenir un daño mayor. Sin embargo, la mayoría de las personas no recuperan por completo la memoria perdida. El tratamiento incluye reemplazar la tiamina en el cuerpo, garantizar una nutrición adecuada y no beber alcohol.

Si la enfermedad de Alzheimer causa la amnesia, el tratamiento con medicamentos llamados inhibidores de la colinesterasa puede ayudar con los síntomas.

La investigación quizás algún día lleve a nuevos tratamientos para los trastornos de la memoria. Sin embargo, es poco probable que un solo medicamento pueda resolver problemas de memoria debido a la complejidad de los procesos cerebrales involucrados.

Estrategias de afrontamiento y apoyo

Vivir con amnesia puede ser frustrante para las personas que presentan pérdida de memoria, y también para sus familiares y amigos. Es posible que las personas con formas más graves de amnesia requieran asistencia directa de familiares, amigos o un cuidador profesional.

Puede ser útil conversar con otras personas que entiendan lo que estás pasando. Pueden darte consejos o sugerencias sobre cómo vivir con amnesia. Pide al proveedor de atención médica que te recomiende un grupo de apoyo en tu zona para personas con amnesia y sus seres queridos.

Si se identifica la causa subyacente de la amnesia, hay organizaciones nacionales que pueden proporcionar información o apoyo adicionales. Entre los ejemplos, se incluyen:

• Alzheimer's Association (Asociación para el Alzheimer) 800-272-3900 (línea gratuita).
• La Brain Injury Association of America (Asociación Estadounidense para las Lesiones Cerebrales) 800-444-6443 (línea gratuita).

Preparación para la consulta

En primer lugar, puedes consultar al proveedor principal de atención médica. Sin embargo, es probable que te remitan a un especialista en enfermedades del cerebro y del sistema nervioso, también llamado neurólogo.

Es recomendable llegar bien preparado a la cita. A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte y a saber qué puedes esperar.

Qué puedes hacer

• Anota los síntomas inusuales que los tengas, incluso los que parezcan no tener relación con el motivo de la cita médica.
• Anota información personal clave, como episodios importantes de estrés o cambios recientes en tu vida. Pídeles a tus familiares o a tus amigos que te ayuden para asegurarte de que la lista esté completa.
• Haz una lista de todos los medicamentos, vitaminas o suplementos que tomes.
• Pídele a un familiar o a un amigo que te acompañe. Incluso en las mejores circunstancias, puede ser difícil recordar toda la información que se te proporciona durante una cita médica. Un familiar o amigo puede ayudarte a recordar todo lo que se dijo.
• Lleva un cuaderno y una lapicera o un lápiz para anotar los puntos que quieras asegurarte de recordar.
• Anota las preguntas que quieras hacerle al proveedor de atención médica.

Preparar una lista de preguntas puede ayudarte a aprovechar al máximo tu tiempo con el proveedor de atención médica, y a asegurarte de que se traten todos los temas sobre los que quieras consultar. Algunas preguntas básicas para hacer sobre la amnesia incluyen las siguientes:

• ¿Cuál es la causa más probable de mis síntomas?
• ¿Existen otras causas posibles de mis síntomas?
• ¿Qué tipo de pruebas necesito hacerme? ¿Estas pruebas requieren alguna preparación especial?
• ¿Recuperaré la memoria en algún momento?
• ¿Cuáles son los tratamientos disponibles y cuál me recomienda?
• Tengo otras enfermedades. ¿Cómo puedo controlarlas mejor de manera conjunta?
• ¿Es necesario que limite alguna actividad?
• ¿Hay algún folleto u otro material impreso que pueda llevarme a casa? ¿Qué sitios web me recomienda?

Además de las preguntas que preparaste, no dudes en hacer otras preguntas durante la cita médica en caso de que no comprendas algo.

Qué esperar del médico

Es probable que el proveedor de atención médica te haga una serie de preguntas, como las siguientes:

• ¿Cuándo notaste por primera vez la pérdida de memoria?
• ¿Tuviste otros síntomas en ese momento?
• ¿Sufriste algún traumatismo? Por ejemplo, un accidente automovilístico, una colisión violenta al hacer deporte o una agresión.
• ¿Una enfermedad u otro evento parece haber desencadenado la pérdida de memoria?
• ¿Hay algo que te ayude a mejorar la memoria?
• ¿Hay algo que parezca empeorar la pérdida de memoria?
• ¿Los problemas de memoria aparecen y desaparecen o son constantes?
• ¿La pérdida de memoria se mantuvo igual o empeora?
• ¿La pérdida de memoria apareció de manera repentina o progresiva?